El Consell de Govern, a petición de la Conselleria de Salut i Consum, aprobó la creación de la figura del defensor de los usuarios de la sanidad pública de Balears. Todavía no se ha elegido a la persona que desarrollará este cargo quien, aunque dependa de la conselleria, actuará con «independencia y autonomía», según afirmó la responsable de Salut. Aina Castillo afirmó que se pretende buscar una persona de consenso entre las fuerzas políticas, con el único requisito de que debe ser, o bien un jurista de reconocido prestigio, o un profesional con amplia experiencia en la administración sanitaria. El defensor del paciente, que dispondrá de un presupuesto anual de 200 mil euros, tendrá derecho a acceder a cualquier información sanitaria que precise para investigar una queja. La persona que se encargue de este trabajo se le contratará, en régimen de dedicación exclusiva, por un periodo de cinco años, y no debe estar afiliada a ningún partido político, sindicado, asociación empresarial, colegio profesional ni fundación sanitaria.
La consellera Aina Castillo explicó que el defensor del paciente estudiará todas las quejas que tramiten los usuarios de la sanidad pública en Balears. Se encargará de investigar caso por caso y, para ello, podrá requerir a cualquier centro sanitario de Balears la información que precise en el ejercicio de sus competencias. Asimismo, podrá sugerir a la Conselleria mejoras para lograr optimizar el servicio sanitario.
El doctor Josep Corcoll, director general de Planificación y Financiación de la Conselleria, aclaró que el defensor del paciente deberá abstenerse de investigar un asunto cuando ya lo está haciendo la Justicia. Corcoll explicó que las gestiones que realice el defensor del paciente para investigar una queja serán gratuitas para el usuario de la sanidad pública. Las quejas presentadas ante los otros servicios de salud, y que no hayan sido contestadas o resueltas, se enviarán al defensor del paciente, para que en un plazo de 15 días se pronuncie sobre el tema.
La consellera Castillo consideró que la creación de esta figura es «básica en la transparencia de la sanidad y en conseguir la mejora de los servicios sanitarios». Aina Castillo reconoció que el Govern no dispone todavía de una terna de candidatos, si bien afirmó que se pretende que esta persona se elija cuanto antes. La consellera señaló que las quejas más frecuentes que se tramitan suelen ser por demoras en la asistencia sanitaria.