La Policía Turística ya se prepara en el Poliesportiu Germans Escalas. Un total de 69 alumnos de Mallorca seleccionados previamente por oposición han comenzado esta semana un curso de 300 horas, en el que tendrán que prepararse a fondo para optar a las 78 plazas disponibles para este verano en todos los municipios de la Isla (interior y costa). También optarán a estas plazas 41 policías de temporada (que ya habían realizado previamente un curso de 220 horas y que a partir de marzo tendrán que cursar 80 horas más). El resto quedará en un bolsín. Hay también 20 plazas más en Eivissa y 12 en Menorca.
Martín Mancha, coordinador de los cursos, dice que «lo que define a la Policía Turística es su preparación en idiomas -es esencial el inglés y también el catalán-. Además deben tener una preparación física adecuada».
Los alumnos empiezan la preparación física por la mañana, en una sesión que comienza a las ocho y acaba a las nueve. A la semana se reservan dos días para defensa personal, un día para la natación y dos días para educación física. Después se van a Son Malferit, donde se imparten materias de derecho penal, tráfico, seguridad vial, extranjería y clases de idiomas. Este tipo de policía debe reunir todos los requisitos para atender adecuadamente a los turistas de la Isla. Las tareas administrativas también son esenciales: denuncias, atestados, actas. Posteriormente también realizarán un curso de salvamento acuático y primeros auxilios.Gabriel Tomás, de 20 años, aseguraba ayer al salir de su clase de defensa personal: «Estoy muy ilusionado. Llevaba dos años intentando entrar en la policía hasta que en diciembre me llegó mi oportunidad. Ahora nos queda otro examen para el que hay que estar aún más preparado».
Aurora Cadí, con el cabello mojado, asegura: «Hoy hemos hecho natación. Crowl, mariposa, resistencia. Hay que estar bien preparada. Ser Policía Turística es lo mismo que Policía Local, pero con una orientación especial hacia el visitante. Pasé el primer examen. Ahora me hace mucha ilusión optar por la plaza. Siempre he querido ser policía».
Paquita García, instructora de defensa personal, dice: «En general, hay nivel e ilusión. La gente está bastante preparada. Hay alumnos que tienen nociones de artes marciales. La clase de hoy ha consistido en técnicas básicas de aikido, cacheo personal, colocación de grilletes, uso de defensa (porra). Serán un total de 50 horas, realizadas en 10 semanas». García, mientras imparte sus lecciones, dice a sus aventajados alumnos: «En la calle vale todo. Así que debéis estar bien preparados. En Son Llàtzer arreglan bien los huesos».