UM se desmarcó ayer de su pacto con el PP en el Consell y votó con los partidos de izquierda a favor de una reforma de la Constitución que reconozca que España es un estado plurinacional y que permita que el Senado sea la auténtica cámara de representación de las comunidades autónomas. El voto se produjo durante el pleno celebrado por el Consell para estudiar las propuestas de resolución del debate de política general de la institución. En paralelo, los nacionalistas de UM también posibilitaron crear una comisión que inicie los trámites para presentar un proyecto de ley de modificación del Estatut d'Autonomia. Entre las propuestas de la oposición que apoyó UM se encuentra la petición de un concierto económico con el Estado o fórmulas equivalentes que permitan acabar con el «agravio fiscal» que sufre la Comunitat.
Otro de los aspectos en los que PP y UM votaron diferente fue en la petición dirigida al Gobierno central para que retire el recurso presentado contra la Ley de Consells. En esta ocasión, el PP no votó en contra sino que se abstuvo. UM, por su parte, se abstuvo en otras dos propuestas del PSM que pedían al Govern que no rebaje los requisitos de catalán para los funcionarios y al Gobierno, que no fomente la enseñanza del valenciano en las escuelas de idiomas. Todos los partidos votaron a favor de una propuesta del PSM para que el Govern cree un modelo audiovisual propio y una de EU-EV en la que se apuesta por una televisión autonómica que utilice el catalán como vehículo de expresión. El PP y UM sacaron adelante todos sus propuestas gracias al Pacto que les une en esta legislatura.
Donde no hubo posibilidad de acuerdo fue en las diversas propuestas territoriales. Los partidos de la oposición habían pedido la retirada del proyecto de la polémica autovía entre Inca y Manacor, propuesta que no salió adelante ya que PP y UM votaron en contra. El pacto entre nacionalistas de UM y populares también impidió que saliera adelante otra propuesta de la oposición en la que se pedía la retirada del Plan Territorial de Mallorca. La sorpresa de la votación la dio el PSOE, cuando decidió abstenerse en una propuesta presentada por EU-EV en la que se reclamaba que el Plan Territorial no permita la construcción de ningún nuevo campo de golf en la Isla.