Dos puntos del polígono de Son Castelló vivieron especialmente la alegría del «Gordo». Uno de ellos fue la Direcció General de Recursos Hídrics, dependiente de la Conselleria de Medi Ambient. Una docena de funcionarios tenía décimos comprados por uno de ellos en Sort ¡el pasado agosto! Al enterarse de la noticia, abandonaron sus puestos de trabajo. Al mediodía, esta dirección general era casi un desierto. Sólo quedaban los «no agraciados», pero no tanto, pues lo ocurrido en Medi Ambient no acaba aquí. El número compartido por todos los funcionarios de la Conselleria era el 43.473 y el «Gordo» es el 42.473. Sólo cambia una cifra, la de las unidades de millar. Unos compraron un décimo entero y otros, medio o participaciones más pequeñas. En defintiva, 120 euros por décimo por las tres últimas terminaciones. Uno no sabe si es bueno que te toquen 120 euros si a tu compañero de mesa le ha tocado el «Gordo».
Donde sí reinaba la alegría de manera indiscutible era en Cafés Rico. La hija de una de las empleadas estudia en Capdepera y se trajo a Palma tres blocs de papeletas. Una decena de trabajadores de Cafés Rico (entre ellos, Francisca Gil, Maria Oliver, Guillem Ferriol, Encarna Pozo, Maria Cirer y Biel C.) han conseguido importantes pellizcos. La niña que trajo la suerte es Raza Masda, hija de Sora Arzawi, de nacionalidad marroquí. Toda la familia tiene papeletas y se lleva 72.000 euros. El padre, Luis Morales, también ha repartido papeletas entre sus amigos del Rafal. Los Morales están pagando un coche y una casa. Trabajadores de otras empresas del polígono también tienen papeletas adquiridas en Cafés Rico.