Hoy en la calle se comenta más una foto o un chiste que te han enviado por correo electrónico que cualquier noticia publicada en un diario o vista en un telediario. Es la grandeza de Internet.
A través de la Red uno puede dar rienda a suelta a su imaginación, escudriñar su humor negro, despertar su vena erótica y compartir una ironía, un chiste o una foto con un ser querido y al instante, sin importar la distancia entre ambos.
La mayoría de estos mensajes que recibimos en nuestro correo electrónico y que llegan a Mallorca después de haber recorrido el mundo suelen tener carácter crítico y mordaz. En la red no se deja títere con cabeza.
Todos tenemos un amigo un poco verde que te envía un chiste o una imagen porno; todos tenemos un conocido amante y dominador del Photoshop que te envía alguna foto trucada que te saca una carcajada; todos vivimos en la misma sociedad, y si eres chico recibirás un correo machista, o por el contrario, será feminista si eres mujer.
Y lo que es común en todos es la expresión que decimos al recibir estos curiosos y en su mayoría divertidos e-mails: «Hay gente que no tiene nada que hacer».
Primero llega un mensaje escrito (una pregunta, una afirmación, un chiste...) que precede a la conclusión: generalmente una foto trucada.
Y es que todo cabe en la Red, principalmente, todo aquello que no vemos en los medios de comunicación habituales, ni en los libros, ni en los anuncios, ni en las películas... Internet le da el privilegio a cualquiera a ser clandestino y a dar y recibir todas nuestros enseres ocultos. Así es la Red, posiblemente el mejor humorista de todos los tiempos.
David J. Nadal