Balears ha registrado durante la última década la construcción de 6'62 viviendas por cada persona que ha nacido en las Islas. El Llibre Blanc de l'Habitatge presentado ayer por el Govern ha detectado que Balears presenta una intensidad muy elevada de viviendas por kilómetro cuadrado, así como un consumo de suelo muy elevado. Si se tiene en cuenta la immigración que ha experimentado Balears en la última década, el porcentaje de construcción se eleva a 1'16 viviendas por habitante, también muy por encima de la media nacional.
El Llibre Blanc destaca que una parte sustancial de la oferta residencial va dirigida a la demanda de segunda residencia, así como para uso turístico, pero no como vivienda principal. El análisis considera que durante los años 91"99 se ha producido una evidente sobreoferta de vivienda en relación a las necesidades endógenas de la población. Durante este período el número de viviendas en Balears se ha incrementado en 57.700 unidades. Sin embargo, el nivel de construcción de viviendas sociales es mínimo en relación al mercado libre, un hecho que se ha convertido en la máxima preocupación del Govern.