EU-EV anunciaron ayer por separado que se desvinculan del acuerdo territorial al que han llegado los demás partidos del Pacte al considerar que supone un flagrante incumplimiento de los acuerdos firmados en 1999. Esta no vinculación significa que la formación de izquierdas se reserva su derecho al voto en todas las materias territoriales que se aborden durante el año y medio que queda de la legislatura, a la vez que se reservan el derecho a presentar, sin previa negociación, todas las regulaciones urbanísticas contempladas en el Pacte de 1999.
A pesar de ello, votarán a favor de las iniciativas que supongan una mayor protección del territorio, entre ellas la moratoria y la ley de cupos, que es el único aspecto positivo del acuerdo. Tanto el portavoz de EU, Eberhard Grosske, como el de Els Verds, Jordi López, se mostraron muy críticos con el acuerdo territorial alcanzado por las demás fuerzas del Pacte que, en su opinión, supone un victoria clara de las tesis de UM en cuestiones como la reforma de las DOT, que no se presentará finalmente en el Parlament. Jordi López aseguró que el acuerdo es un incumplimiento flagrante del Pacte, cuestión en la que estuvo de acuerdo Grosske. «Nos sentimos en la obligación de distanciarnos de un acuerdo que conculca el Pacte de 1999, señaló Grosske.
Por lo que respecta al acuerdo en sí, el conseller d'Obres Públiques, Francesc Quetglas, y de Ordenació del Territori del Consell, Rafael de Lacy, explicaron ayer el contenido de la moratoria "que unifica las dos normas cautelares en vigor hasta la fecha" y señalaron que el Pacte territorial se extiende además a dos compromisos clave: UM apoyará una ley de cupos en el Parlament y, a cambio, el Govern retirará su moratoria y la reforma de las Directrices.
Lacy y Quetglas culminaron ayer un largo proceso negociador que se reavivó la semana pasada con una reunión entre Francesc Antich y Maria Antònia Munar, como ya informó Ultima Hora , al igual que del principio de acuerdo entre ambos del pasado martes. En esta negociación han participado además los representantes del PSM, en concreto Antoni Alorda, que ayer mostró su absoluta satisfacción por los términos del acuerdo.