La Conferencia de Regiones Aeroportuarias de Europa (ARC), que reúne a ciudades y territorios de la UE con aeropuertos internacionales, está celebrando en Palma su encuentro anual para analizar la planificación territorial de las ciudades con aeropuertos internacionales, los sistemas de protección medioambiental, la configuración de un espacio único europeo y en especial toda la coyuntura internacional a raíz de los ataques terroristas del 11 de septiembre, que en opinión del presidente de ARC, Bob Verburg, «ha afectado a la calidad de servicio de los pasajeros en los aeropuertos por el alza de las medidas de seguridad, de ahí que se debe actuar para hacer la vida más fácil a los pasajeros».
Verburg reconoció que a raíz del 11-S, «se ha complicado el tránsito de los pasajeros, porque han aumentado las dificultades y trámites de control. Es un factor añadido que hay que tener en cuenta, pero está claro que la seguridad es lo primero, de ahí que sea necesario aumentar las tasas aeroportuarias para poder asumir los nuevos costes».
Sobre las previsiones de mercado de los aeropuertos de la UE para el próximo verano, Verburg dijo que «todo dependerá de lo que suceda en Afganistán». El impacto del 11-S ha afectado al cierre de varias compañías, de ahí que Verburg se muestre partidario de apoyar las medidas económicas de ayudas previstas por la Comisión Europea.
Preguntado sobre la actitud del Gobierno español de seguir manteniendo la actual red aeroportuaria en manos de AENA, comentó que en esta situación, al margen de la valoración política, «apuesto por una fórmula de gestión mixta entre privada y pública en la que también tengan influencia las autoridades políticas de cada territorio. Este sistema mixto es mejor porque al tiempo que permite un sistema competitivo también posibilita el control público en la protección ambiental».
Verburg: «Se prevé una caída del 5% de pasajeros en la
UE tras el 11-S»
El presidente de la Airports Regiones Conference (ARC), Bob
Verburg, afirmó ayer que los atentados del 11 de septiembre en
Estados Unidos supondrán una caída general del 5 por ciento del
tráfico de pasajeros en los aeropuertos europeos.
Verburg recordó que la Guerra del Golfo tuvo como consecuencia una disminución de la afluencia de viajeros en los aeropuertos de Europa del 1'5%, «la situación actual es más grave, aunque confío en que se logre una solución definitiva al conflicto de Afganistán».