Todos los grupos parlamentarios pedirán al Gobierno que legalice el uso terapéutico de la marihuana en el pleno que el Parlament celebra el próximo martes. La proposición ha sido iniciativa del PSOE, que ya ha negociado con el resto de partidos del Pacte su apoyo a esta iniciativa. El PP anunció ayer que se sumará a la petición, si bien lamentó que la proposición no se haya consensuado previamente para que pudiera ir firmada por todos los grupos parlamentarios.
La proposición del PSOE insta al Gobierno a que legalice este uso específico de la marihuana «ante las evidencias científicas y clínicas probadas sobre las posibilidades químicas del cannabis y debido a la situación de ilegalidad en que se encuentra». El PSOE añade que esta ilegalidad «impide que los beneficios de su uso puedan repercutir en la salud de aquellas personas necesitadas de estos beneficios». La diputada del PSOE Francina Armengol explicó que el Govern no tiene competencias sobre esta materia ya que la autorización para el empleo de nuevos medicamentos debe darla el Ministerio de Sanidad. Armengol explicó que el cannabis se usó con fines terapéuticos hasta la década de los 30, cuando fue prohibido su uso y comenzó el consumo estrictamente con fines lúdicos.
«El hecho de haber demonizado la marihuana como una droga ha provocado que su uso terapéutico quede excluido y no se ha adaptado a las farmacopeas», señaló. Armengol explicó que estudios científicos demuestran que la marihuana tiene efectos beneficiosos para los enfermos de cáncer, de sida y de anorexia, entre otros. «Se ha comprobado que fumar marihuana tiene efectos beneficiosos en los tratamientos de quimioterapia, porque es un antivomitivo, también incrementa el apetito en los casos de sida y de anorexia y sirve como relajante para combatir el dolor e incluso se han estudiado sus efectos beneficios en los enfermos de esclerosis múltiple».
El portavoz del PP en la materia, Francesc Fiol, aseguró que su grupo está de acuerdo con esta iniciativa, si bien lamentó que el Pacte no haya tratado de consensuarla previamente a la vista de que se trata de un asunto que puede crear tensiones. En cualquier caso, Fiol afirmó que su grupo apoyará la propuesta «casi con toda seguridad para que sea el médico quien prescriba el uso de la marihuana. «Es positivo que se regule esta situación para mejorar la situación de los enfermos», dijo Fiol.