El Ajuntament de Palma y el Consell Insular de Mallorca subscribieron ayer el convenio de colaboración para la construcción de la maquinaria, y tejado del Molí d'en Garleta, cuya rehabilitación se encuentra muy adelantada.
El fin de esta colaboración es lograr que es este molino harinero vuelva a funcionar «y poder tener así una muestra real de actividad harinera completa en forma de museo de los molinos», según declaró ayer el alcalde de Palma, Joan Fageda.
Según el acuerdo firmado por el primer edil palmesano y la vicepresidenta del CIM, Maria Antònia Vadell, el Consistorio se compromete a facilitar a Fodesma «el uso pacífico del molino para la adecuada ejecución de los trabajos, así como a aportar el 50 por ciento del presupuesto del proyecto», fijado en 8.340.347 pesetas.
Por su parte, el Consell ejecutará la obra y aportará los recursos humanos y materiales precisos para ello, haciéndose cargo del 50 por ciento restante.
La rehabilitación del molino se enmarca en un proyecto más ambicioso consistente en la recuperación de esta parte de la fachada marítima, que incluye la reconstrucción del talud de es Jonquet, de todos los viejos molinos existentes, así como proyectos para devolver el uso a cada una de estas edificaciones.
En concreto, la rehabilitación del Molí d'en Garleta, ejecutada por el Patronat Municipal de l'Habitatge en colaboración con la Asociación Amics dels Molins, supone una inversión de 64.989.444 pesetas, en cuyo pago colaboran Cort, el Govern, el CIM y World Monuments Foud.