En la Central de Sant Joan de Déu se encuentran desde ayer cuatro de las diez desaladoras móviles previstas para ser instaladas en distintos enclaves de Mallorca este verano. Cinco desaladoras estarán en Palma, tres en Calvià y dos en Andratx. Las de Palma ya funcionarán en agosto. El president del Govern, Francesc Antich; la consellera de Medi Ambient, Margalida Rosselló; el director general de Recursos Hídrics, Antoni Rodríguez; y el director gerente de Tirme, Àngel Fernández, visitaron ayer Sant Joan de Déu para conocer cómo funcionarán las desaladoras instaladas en la central.
«Hasta ahora, el único que ha aportado fondos con respecto a estas desaladoras ha sido el Govern de les Illes Balears, a pesar de que se ha ido pidiendo al Estado que ayudase en la financiación de las mismas. No llegamos a tener una respuesta clara por parte del ministro de Medio Ambiente, Jaume Matas», señaló Antich. Sobre este punto el president del Govern añadió: «Hoy hemos estado hablando con la Comisión Europea, y ésta dice que no hay ningún tipo de problema para que el Estado pueda ayudar a financiar esta actuación urgente de la Comunidad Autónoma. Además, desde la Comisión Europea también se nos ha informado de que incluso cuando se trata de una actuación de emergencia, el Estado puede emplear los fondos de cohesión».
Antich hizo una petición expresa al ministro de Medio Ambiente: «Lo que le pediría al señor Matas es que reconsidere el tema, que ayude, y que piense en el esfuerzo que hemos tenido que hacer tanto el Govern como los distintos ayuntamientos de la bahía de Palma».