El Govern balear prepara un decreto de medidas de emergencia para combatir los efectos de la sequía, según anunció ayer el director general de Recursos Hídricos, Antonio Rodríguez. Durante la reunión semanal de la Comisión de la Sequía, celebrada ayer, Rodríguez informó de que la cita del próximo jueves quedaba suspendida para dar paso a la celebración de una reunión del Consejo General del Agua de Balears, el máximo órgano de los consumidores. Asimismo, adelantó que a esta reunión se harían llegar una serie de propuestas del Ejecutivo autonómico en materia de ordenación del agua y se presentará un borrador de decreto de emergencia contra la sequía.
Aunque no especificó las medidas que este decreto de emergencia podrá contemplar, la presidenta de la Empresa Municipal de Aguas y Alcantarillados se mostró esperanzada en que se incluya el permiso para realizar extracciones de agua en pozos salobres, que se encuentran en situación de riesgo.
Desde la empresa suministradora se aclaró que la necesidad de seguir haciendo uso del agua de estos acuíferos es imperiosa y la firma de este decreto podría liberar a las administraciones de responsabilidades civiles en caso de salinizaciones irreversibles de sus aguas.
La Ley de Aguas contempla las situaciones de excepción, pero es competencia del Govern balear el determinar las medidas necesarias para afrontar un caso de emergencia como el que actualmente vivimos en las Islas. «Y la firma de este decreto es el reconocimiento definitivo de la crisis que padecemos», se anotó desde la empresa municipal. Este decreto de emergencia será paralelo a la declaración de zona catastrófica que se espera que firme el Gobierno central y que se traducirá en subvenciones para la realización de proyectos.