Los profesionales que participan en las XVI Jornadas Nacionales de la Asociación Española de Neuropsiquiatría (AEN), que se celebran en Palma, critican la falta de recursos comunitarios en Balears para atender las enfermedades mentales, que queda reflejado en el déficit que supone contar con un equipo de tres profesionales (psiquiatra, psicólogo y enfermera) por cada 110.000 habitantes.
El presidente de la Asociación Española de Neuropsiquiatría (AEN) Mariano Hernández manifestó que lo aconsejable es un psiquiatra por cada 20.000 habitantes. El coordinador de estas jornadas, Rafael de la Rosa, atribuyó este desfase a que en Balears no se ha iniciado todavía la reforma psiquiátrica, mediante la puesta en marcha de un plan de salud mental, cuyo modelo se centre «no en la hospitalización y reclusión de los pacientes sino en la atención comunitaria».
Balears destina un 2 por ciento de su presupuesto sanitario a salud mental, frente al 5 por ciento de la media nacional, dijo De la Rosa, quien consideró que el 70 por ciento se consume en atención hospitalaria y el 30 por ciento en la comunitaria, cuando «debería invertirse» porque la tendencia de la reforma es desarrollar redes de atención comunitaria.
Explicó que, en Balears, los pacientes mentales con problemas graves ingresan en Son Dureta y una vez dados de alta, al no tener un seguimiento por parte de un equipo ambulatorio, vuelven a recaer y a ser de nuevo ingresados.