Igualarse con otras profesiones como son abogados, médicos o arquitectos y resolver el problema de desunión que sufren los auditores son dos de los principales retos que tiene en estos momentos el Instituto de Auditores-Censores Jurados de Cuentas de España según comentó ayer en Palma su presidente José María Gassó. «Queremos tener las mismas cualidades que tienen cualquier otra profesión del país», señaló Gassó quien señaló que es muy importante poder autoregularnos y vencer la desunión.
José María Gassó se trasladó ayer hasta Palma para participar en los actos del Día del Auditor. Entre los actos celebrados figuraron el solemne acto de juramento o promesa de 12 nuevos auditores-censores en Balears y el reconocimiento público de la labor de los que llevan ejerciendo durante un periodo de 25 años con un reconocimiento especial a José María Lafuente López que lleva 50 años perteneciendo al instituto. Asimismo, se nombró presidente de honor del instituto en las Islas a Bartolomé Nadal que ocupó la presidencia en Balears durante trece años. En la actualidad María del Carmen del Valle ocupa esta presidencia. También se dieron dos conferencias sobre «La incompatibilidad del auditor y el abogado».