El barrio más degradado de Palma, sa Gerreria, contará dentro de unos meses con un nuevo espacio sociocultural de 3.006 metros cuadrados: el centro Flassaders. Esta antigua fábrica de mantas, construida inicialmente en 1862 y que ha sufrido distintas ampliaciones, fue visitada ayer por el alcalde de Palma, Joan Fageda, y por el teniente de alcalde de Urbanismo del Ajuntament, Carlos Ripoll.
Durante la visita realizada ayer, los responsables municipales comprobaron que las obras avanzan a buen ritmo, a pesar de que en los trabajos previos han aparecido complicaciones no previstas debidas al mal estado del edificio. Los responsables de los trabajos técnicos aseguraron que, con el objetivo de conservar los materiales originales, han tenido que aplicar un tratamiento de choque a todas y cada una de las vigas de madera.
El teniente de alcalde de Urbanismo explicó durante la visita que, gracias al programa Urban, se pensó que la antigua fábrica de mantas era uno de los edificios más interesantes del barrio. Por eso pensaron que era una excelente ubicación para un centro socio educativo destinado al ocio. Será un centro cívico abierto a los vecinos del barrio que acogerá en sus distintas plantas una sala de exposiciones, un club de la tercera edad, un bar, guardería, oficinas, aulas talleres para padres, sala de conferencias, talleres socioculturales, aulas de apoyo, gimnasio, sala de ordenadores, ludoteca y club de juventud.
El presupuesto global de esta obra será de 303 millones de pesetas, entre adquisición y rehabilitación.