Al menos 21 personas han muerto en el medio oeste de Estados Unidos como consecuencia de una ola de tornados nocturnos que se ha cebado especialmente con los estados de Kentucky y Misuri, donde han fallecido 14 y siete personas respectivamente.
De acuerdo a los reportes, cinco personas murieron en San Luis y otras dos en el condado de Scott, en el sureste de Misuri. «Nuestra ciudad está de luto esta noche», dijo a la prensa la alcaldesa de San Luis, Cara Spencer, que juró su cargo hace un mes. «La pérdida de vidas y la destrucción es verdaderamente, verdaderamente horrenda». Un portavoz tanto del Hospital Infantil de San Luis como del Hospital Barnes-Jewish dijo a la cadena de noticias NBC que al menos 35 personas heridas habían sido ingresadas en las instalaciones, de las cuales el centro infantil recibió a 15 y el Barnes-Jewish acogió al menos a 20, posiblemente 30 heridos como consecuencia de las inclemencias meteorológicas.
La ciudad impuso un toque de queda en dos distritos policiales donde se produjeron la mayor parte de los daños para evitar heridos por escombros peligrosos y reducir la posibilidad de saqueos. En el momento en que se produjo el tornado mortal, estaba en vigor un aviso de condiciones meteorológicas peligrosas para el este de Misuri, incluida la zona de San Luis, que advertía de fuertes tormentas eléctricas hasta primeras horas de la tarde del viernes, y una alerta de tornado para las zonas situadas inmediatamente al sureste.
El Servicio Meteorológico Nacional dijo que las tormentas eléctricas se extendieron a través de porciones de los valles del Mississippi, Tennessee y Ohio el viernes, junto con la posibilidad de fuertes lluvias e inundaciones repentinas. Alrededor de 500 socorristas, incluidos 17 equipos de búsqueda, fueron desplegados, y los primeros indicios sugieren que el número de heridos fue relativamente pequeño teniendo en cuenta el daño general, dijo el jefe de bomberos Dennis Jenkerson. El Servicio Meteorológico Nacional informó de al menos media docena de tornados en Misuri y el vecino Illinois, así como de otras condiciones meteorológicas adversas hasta la costa atlántica, incluido otro tornado en Nueva Jersey.