Al menos dos cascos azules resultaron heridos, ninguno español, este viernes en un nuevo ataque israelí contra el cuartel general de la misión de paz de la ONU en el Líbano (FINUL), el segundo, el cuarto atribuido a Israel contra tropas de la ONU en dos días. Según la agencia nacional de noticias libanesa, NNA, el ataque tuvo lugar cuando un «tanque enemigo Merkava (supuestamente israelí) atacó una de las torres de la FINUL (...) hiriendo a dos soldados del batallón de Sri Lanka».
Fuentes del Ministerio de Defensa español han asegurado que no hay ningún soldado español afectado, ya que en la zona donde se encuentra el grueso del contingente español en el Líbano no ha habido ataques.
Human Rights Watch (HRW) pidió este viernes a la ONU que investigue los «repetidos ataques» contra las operaciones de mantenimiento de la paz de las Naciones Unidas (FINUL) en el suroeste del Líbano, en «aparente violación de las leyes de la guerra» tras la acción de ayer que dejó al menos dos soldados heridos. «Las fuerzas de mantenimiento de la paz de la ONU en el sur del Líbano han desempeñado durante mucho tiempo una función humanitaria y de protección de civiles fundamental», indicó la directora para Oriente Medio y el Norte de África de HRW, Lama Fakih, en un comunicado.
Y recordó que «cualquier ataque contra las fuerzas de paz de la ONU por parte de fuerzas israelíes viola las leyes de la guerra e interfiere peligrosamente en la labor de protección civil y ayuda de la FINUL». Por ello, HRW pidió a la ONU que establezca «urgentemente, y sus países miembros deben apoyar, una investigación internacional sobre las hostilidades en Líbano e Israel con el mandato de informar públicamente sobre las violaciones. La ONU y los países miembros deben garantizar el envío inmediato de investigadores que recopilen información y lleguen a conclusiones sobre las violaciones del derecho internacional».
Ayer, la FINUL informó de que al menos dos cascos azules resultaron heridos en un ataque israelí contra una torre de vigilancia de su cuartel general en Naqoura, en el sur del país, en una de al menos tres acciones atribuidas a Israel contra tropas de la ONU en las últimas 24 horas. Por su parte, el Ejército israelí acusó al grupo chií libanés Hizbulá de «operar» cerca de los puestos de misión de la ONU en el sur de Líbano y reconoció haber llevado a cabo disparos cerca de su base de Naqoura.
Poco después de la denuncia de la FINUL, el portavoz adjunto del secretario general de la ONU, Farhan Haq, afirmó que la misión de la ONU «permanece en sus puestos» porque «tiene un papel vital para garantizar la estabilidad en esta parte». Recordó que Israel ha formulado ya varias «peticiones» a la FINUL para evacuar las bases, pero al respecto recordó que «tienen un mandato que cumplir». La FINUL es una misión de mantenimiento de la paz en el sur del Líbano que el Consejo de Seguridad de la ONU estableció en 1978 y en virtud de su mandato, deben supervisar el cese de las hostilidades y ayudar a garantizar el acceso de la ayuda humanitaria a la población civil y el retorno de los desplazados tras la guerra de 2006 entre Israel y el Líbano.