La tormenta tropical Julia dejaba al menos seis muertos tras su paso por Centroamérica, dijeron el lunes autoridades, y se prevé que el ciclón siga descargando fuertes lluvias que alcanzarán hasta el sur de México en las próximas horas. En El Salvador, donde el centro de Julia de ubicaba la mañana del lunes, tres personas perdieron la vida, informaron autoridades de Protección Civil. Dos de ellas luego del derrumbe de un muro que cayó sobre una vivienda en el departamento Morazán, a unos 146 kilómetros al este de San Salvador. Una más pereció en el departamento occidental Sonsonate, cuando un árbol cayó sobre su casa.
En El Salvador, los socorristas han evacuado a 830 personas y se reportan unas 141 viviendas anegadas, calles obstruidas y árboles caídos a lo largo del pequeño país de 6,5 millones de habitantes. A las 1200 GMT del lunes, Julia se ubicaba a unos 65 kilómetros al oeste de la capital salvadoreña, San Salvador, y avanzaba a 24 kilómetros por hora (km/h) hacia el oeste-noroeste mientras soplaba vientos máximos sostenidos de 65 km/h con ráfagas más fuertes. «El riesgo de inundaciones repentinas y deslizamientos de lodo que amenazan la vida continuará a través de Centroamérica y el sur de México hasta el martes», advirtió el Centro Nacional de Huracanes de Estados Unidos (NHC, por sus siglas en inglés). Julia, que tocó tierra en la costa oriental de Nicaragua el sábado como un huracán de categoría 1, se fue debilitando rápidamente a medida que se internaba en Centroamérica.
Sin embargo, sus fuertes lluvias dejaron al menos tres muertos y un desaparecido en Honduras, según autoridades. Los restos de una mujer de entre 26 y 28 años y un niño de cuatro años fueron hallados el domingo tras el naufragio de una embarcación en el departamento Gracias a Dios, en la costa caribeña del Honduras, dijo a Reuters Manolo Wood, alcalde del municipio Brus Laguna. Una mujer de 22 años perdió la vida tras ser arrastrada por las aguas de un río en el norteño Valle de Sula, cerca de la frontera con Guatemala, informó a Reuters Cristian Sevilla, portavoz del Cuerpo de Bomberos. En Nicaragua, se reportaron más de 2,000 viviendas destruidas y 3,000 anegadas. (Reporte de Nelson Rentería en San Salvador; Reporte adicional de Gustavo Palencia en Tegucigalpa e Ismael López; Escrito por Diego Oré en Ciudad de México)