El Ministerio del Interior egipcio afirmó este sábado que han procedido al arresto de trece estudiantes con edades comprendidas entre 13 y 15 años a raíz de un vídeo difundido profusamente en las redes sociales donde se les veía acosando a dos mujeres turistas en las pirámides de Guiza, al oeste de El Cairo. «Los servicios de seguridad no recibieron ninguna denuncia, pero con la ayuda de tecnologías modernas, fue posible identificar y arrestar a estos adolescentes», indicó el ministerio en un comunicado difundido en su cuenta oficial de Twitter, en el que mostró a los trece adolescentes detenidos en una fotografía con sus caras difuminadas.
Los arrestados son «13 estudiantes con edades entre los 13 y 15 años que estaban en el área arqueológica de las pirámides para dar un paseo con motivo del Aíd al Fitr», que marca el fin del mes sagrado musulmán de ramadán y cuyo festivo ha sido durante esta semana, se apunta en la nota. «Los estudiantes aseguraron que cuando vieron a las dos turistas, intentaron conversar y tomarse fotos con ellas, aclarando que sus comportamientos no fueron con la intención de acosar», según la nota. Asimismo, señaló el ministerio que fue un guía turístico quien grabó el video y lo publicó en un grupo de WhatsApp hecho para guías turísticos, y uno de ellos lo publicó en las redes sociales, donde comenzó a difundirse.
En el clip de más de 30 segundos se ve a un grupo de adolescentes persiguiendo a dos turistas, mientras que uno de los guías turísticos dice en la filmación que el vídeo se «lo va a enseñar al ministro de Turismo» y afirma al final que lo que están haciendo es «acoso a los extranjeros», por lo que los niños comienzan a correr. Hasta el momento, las autoridades judiciales egipcias no se han pronunciado sobre el castigo que se les podría imponer a los niños. En Egipto el acoso sexual es un fenómeno muy común, pero es tabú debido a los valores machistas y conservadores en la sociedad, aunque en los últimos años ha aumentado la conciencia respecto a este problemas así como las medidas para atajarlo. Las autoridades han dado algunos pasos para poner fin a esta lacra en los espacios públicos, aunque en muchos casos han sido meras medidas estéticas sin impacto en la vida de las egipcias, tal y como denuncian organizaciones feministas.