Varias regiones de la India amanecieron este viernes bajo un manto de niebla tóxica que alcanza niveles de contaminación «peligrosos» a causa de la quema de petardos por las celebraciones de Diwali, la navidad hindú, pese a que las autoridades prohibieron su compraventa por la polución.
Nueva Delhi registró esta mañana concentraciones de partículas PM 10 (aquellas menores de 10 micrones) y PM 2,5 (inferiores a 2,5 micrones y las más peligrosas para el ser humano) varias veces superiores a las consideradas «tóxicas» por la Organización Mundial de la Salud (OMS), según la principal agencia de monitoreo ambiental de la India, SAFAR.
En el sur de la ciudad tanto los valores de PM 10 como los PM 2,5, con medidores de solo tres dígitos, alcanzaron su máximo de 999 partículas por metro cúbico durante casi toda la noche, cuando la quema de petardos todavía seguía en curso en la capital india.
Pese a que la concentración de partículas descendió a partir de las siete de mañana de manera moderada, los valores en Nueva Delhi siguen estando por encima de los considerados dañinos para la salud.
La situación era similar en varias regiones situadas en el norte de la India, donde la calidad del aire se considera o «muy pobre» o «peligrosa».
La OMS afirma que las concentraciones superiores a 100 partículas PM 10 son peligrosas para grupos de riesgo, mientras que por encima de 300 considera el aire como tóxico para el ser humano.
Las autoridades indias volvieron a prohibir este año la venta y uso de petardos para evitar tanto la concentración de partículas nocivas en el aire del país, como el empeoramiento de los efectos de la covid-19; sin embargo, los sonidos de artefactos pudieron escucharse hasta altas hora de la madrugada en ciudades como Nueva Delhi.
Aunque hoy la nación asiática registra sus cifras más bajas desde el inicio de la pandemia, con poco más de 12.700 casos y 221 muertes en la última jornada, la festividad de Diwali amenaza con incrementar los contagios por las tradicionales reuniones familiares y la masificación en las zonas comerciales.
Además varios estudios han relacionado la polución del aire a una mayor mortalidad en casos de covid-19. Entre ellos, uno realizado por Xiao Wu y Rachel C. Nethery, de la Universidad de Harvard, vincula la exposición a largo plazo a materia de partículas finas (PM 2.5) y la mortalidad a causa del virus.
Un estudio de la empresa suiza de tecnología de la calidad del aire IQAir difundido este año reveló que de las 30 ciudades más contaminadas del mundo, 22 de ellas se encuentran en la India.