La canciller alemana, Angela Merkel, ha dicho este viernes que el próximo día 22 tendrán que volverse a introducir al menos parte de las restricciones que se habían levantado como parte de una proceso escalonado de apertura en el marco de la lucha contra la pandemia de coronavirus. «La situación es difícil, la incidencia sube, estamos en crecimiento exponencial», ha explicado Merkel en una comparecencia dedicada ante todo a la campaña de vacunación.
Merkel ha indicado que aunque no podía anticipar en detalle las decisiones que se tomen el día 22 en una reunión con los primeros ministros de los estados federados ('länder') alemanes está claro que se deberá aplicar lo que ha denominado el «freno de emergencia» para el caso de que la incidencia semanal rebase los 100 contagios por 100.000 habitantes. El anuncio mantiene expectante al sector turístico balear, que aguarda la llegada masiva de turistas alemanes durante la Semana Santa.
Por su parte, el Instituto Robert Koch (RKI) de virología apeló este viernes a los alemanes a no viajar dentro ni fuera del país en Semana Santa con el fin de no acelerar aún más la tercera ola de la pandemia. El vicepresidente del organismo, Lars Schaade, pidió a la población pasar los festivos de Semana Santa «en el círculo más reducido» posible y a renunciar a los viajes. «La movilidad y los contactos son los impulsores de la pandemia», advirtió, y recordó que las mutaciones del coronavirus son aún más contagiosas que el virus original.
«Esta bien que hayamos acordado un freno de emergencia y tendremos que aplicarlo. Me hubiera gustado poder evitarlo pero no será posible», ha explicado Merkel. Eso implicará probablemente que vuelvan a cerrarse los comercios no esenciales -que se habían reabierto con restricciones- y que se vuelva a la regla que hasta el 3 de marzo prohibía encuentros con más de una persona que viviera en otro domicilio.
El ministro alemán de Sanidad, Jens Spahn, ya advirtió este viernes de la posible necesidad de tener que dar un paso atrás en la relajación de las medidas restrictivas en vista del rápido aumento de la incidencia de nuevos contagios en el país en los últimos días y el avance de la tercera ola.
La incidencia semanal volvió a subir notablemente en Alemania, hasta 95,6 nuevos casos por cada 100.000 habitantes, frente a 90 de este jueves y 86,2 el miércoles, mientras que hace una semana estaba en 72,4.
Las autoridades sanitarias registraron 17.482 nuevos contagios con covid-19 en las últimas 24 horas, más de cinco mil más que el pasado viernes, y la cifra de víctimas mortales en un día sumó 226, frente a 252 hace una semana, según datos del Instituto Robert Koch (RKI) de virología actualizados la pasada medianoche.
El pico de incidencia se había registrado el pasado 22 de diciembre con 197,6 y el 28 de enero volvió a caer por debajo de 100 por primera vez en tres meses con una tendencia a la baja que se mantuvo durante unas semanas y luego fue revertida.
La tenencia al alza ha sido explicada por la presencia de las nuevas variantes del coronavirus consideradas más agresivas y más contagiosas.
El aumento de la incidencia había hecho ya que muchos expertos se pronunciaran a favor de revocar las medidas de apertura.