El líder norcoreano, Kim Jong-un, hizo este sábado su primera aparición en los medios estatales del régimen después de estar ausente del ojo público durante una veintena de días, lo que disparó los rumores sobre su estado de salud.
Los medios oficiales norcoreanos recogen hoy la asistencia de Kim a una ceremonia celebrada en la víspera para marcar la finalización de la construcción de una planta de fertilizantes en Sunchon, a unos 50 kilómetros al norte de Pionyang.
Se trata de la primera aparición del líder norcoreano en unas tres semanas, una larga ausencia que, unida al hecho de que no asistió a varios actos importantes del régimen, generó todo tipo de conjeturas sobre su estado de salud e incluso sobre su posible muerte.
La agencia estatal norcoreana KCNA publicó fotografías para ilustrar la asistencia de Kim al acto donde aparece el dictador visitando la planta y cortando una cinta inaugural acompañado por su hermana, Kim Yo-jong, además de otros altos cargos del régimen.
El líder norcoreano supervisó las nuevas instalaciones y expresó su «satisfacción por la maravillosa construcción» que «refuerza las tareas y capacidades para desarrollar la industria química» del país, señala la nota publicada por el medio oficial del hermético régimen.
El acto también contó con la asistencia multitudinaria de trabajadores de la planta, a quienes se puede ver con el rostro protegido con mascarillas mientras aplauden durante la intervención de Kim en las imágenes publicadas por KCNA.
La propaganda norcoreana llevaba desde el 12 de abril sin informar de una actividad sobre el terreno o publicar una imagen actual de Kim Jong-un, aunque sí había anunciado desde entonces el envío por parte del líder de mensajes de agradecimiento a trabajadores y cartas diplomáticas o regalos.
En ese contexto, marcado a su vez por la pandemia de coronavirus, y ante la tradicional opacidad del régimen norcoreano, diferentes medios han publicado informaciones, citando siempre fuentes anónimas, en las que se dice que el estado de salud del mariscal es delicado, en muchos casos por una supuesta operación de corazón.
El primer medio en publicar algo así fue el diario digital Daily NK (basado en Seúl y con extensos contactos en el Norte), que informó de que Kim habría sido trasladado a Hyangsan (110 kilómetros al noreste de Pionyang) para operarse del corazón.
El Gobierno de Corea del Sur restó credibilidad a estas informaciones y señaló que la ausencia pública de Kim podía deberse a interés del régimen por reducir la escala de grandes eventos en el marco de sus esfuerzos por combatir el coronavirus.