El Partido Socialista (PS), formación que este año perdió la presidencia y el control del Parlamento en Francia, decidió hoy reemplazar a su secretario general dimisionario, Jean-Christophe Cambadélis, por una dirección colectiva, compuesta por veintiocho miembros.
En París, el Consejo Nacional del partido propuso mantener esta fórmula hasta el congreso que se celebrará en febrero o marzo próximos. En esta dirección colectiva destaca el senador y consejero de la región parisina Rachid Temal, encargado de la coordinación y representante legal de la formación.
«Hay que ir al encuentro de los militantes para que el partido pueda hallar una estrategia, una identidad, para que sea visto por los electores como la fuerza de izquierdas que es capaz de reconquistar el poder», dijo el diputado y exministro francés de Agricultura Stéphane Le Foll. En agosto pasado, el PS había propuesto la celebración de unos talleres que recogiesen ideas para refundarlo.
El Partido Socialista, que ha gobernado durante diecinueve años en los mandatos de François Mitterrand (1981-1995) y François Hollande (2012-2017) desde que comenzó la V República en 1958, entró en barrena en las dos citas electorales de 2017.
Su aspirante Benoît Hamon, del ala más izquierdista, logró solo el 6 % de los sufragios en la primera vuelta de las presidenciales de abril, en las que fue eliminado. En las legislativas de junio el partido perdió el control del Parlamento y pasó de 280 a cerca de una treintena de escaños.
Muchos miembros han atribuido el revés a la gobernación «liberal» de Hollande y otros lo justificaron por la crisis existencial que atraviesa la socialdemocracia en Europa.
Prueba de su crisis es la decisión de vender la histórica sede parisina de la calle Solferino, operación con la que esperan recaudar varios millones de euros para compensar la caída de ayudas públicas por su declive electoral.