Decenas de miles de personas se manifestaron en París para pedir al Gobierno que retire el proyecto de legalización del matrimonio entre personas del mismo sexo, cuya adopción definitiva será votada por los diputados el próximo martes.
Se trata de la tercera gran manifestación en la capital francesa contra el matrimonio homosexual, una de las promesas electorales del presidente, François Hollande.
Los organizadores no esperaban igualar las cifras de participación de las manifestaciones anteriores, cuando según sus datos superaron el millón de personas, mientras que la policía sitúo la cifra en más de 300.000.
«Hollande retira tu proyecto», «Un niño necesita un padre y una madre» o «Un niño, ni se alquila ni se vende», son algunos de los lemas que portaban las pancartas de la manifestación.
«Hay que decirle al Gobierno que la mayoría de los franceses se opone a que los homosexuales puedan adoptar, que eso va a acabar con nuestra idea de familia», asegura a Efe Xavier, un estudiante marsellés que afirma haber participado en las anteriores marchas.
Muchos de los participantes acudieron en familia, como Laurence, madre de tres niños, que consideró que «no se puede dejar a nuestros hijos la herencia de una familia sin valores».
Los organizadores de la manifestación tomaron precauciones de seguridad para evitar que se repitan los actos violentos que en los últimos días han tenido lugar en las concentraciones de protesta contra la legalización del matrimonio homosexual.
Algo más de 1.000 agentes se ocupan de la seguridad de la protesta, ante la sospecha de que en ella hay grupos de extrema derecha que podrían provocar actos violentos al final de la misma.
La manifestación tiene lugar a dos días de que, previsiblemente, la mayoría de izquierdas del Parlamento apruebe la legalización de las bodas entre personas del mismo sexo.
Los participantes aseguran que la adopción de la ley no detendrá el movimiento y señalan que continuarán protestando en la calle tras su aprobación.
De hecho, ya han previsto una nueva marcha para el próximo día 5, víspera del primer aniversario de la elección de Hollande, y una más el 26 de mayo, día de la madre.
Los favorables al matrimonio homosexual, por su parte, se concentraron en la plaza de la Bastilla para denunciar el incremento de la homofobia ligado al debate sobre el matrimonio homosexual.
En la concentración había menos gente que la de los contrarios al proyecto gubernamental, pero los organizadores insistieron en que había más personas de las esperadas.