El 40% de alimentos que se producen en el mundo se pierden entre el momento de la cosecha y el consumidor final por la falta de infraestructuras que garanticen buenas condiciones de almacenamiento, transporte y distribución en los países en desarrollo.
En un panel de expertos en el Foro Económico de Davos moderado por la directora del Programa Mundial de Alimentos (PMA), Josette Sheeran, quedaron patentes las fuertes contradicciones que prevalecen en el sector agrícola y que hacen que, a pesar de que la producción alimentaria es suficiente para toda la población mundial, 1.000 millones de personas no puedan pagarse o simplemente no tienen acceso a comida suficiente.
Al mismo tiempo, cuatro de cada diez toneladas terminan desperdiciadas.
Sheeran precisó además que de los 1.000 millones de personas que sufren inseguridad alimentaria, 200 millones están raquíticas.
Horizonte
Ante un aumento previsto de la población del planeta hasta los 9.000 millones de habitantes en 2050, el consejero delegado de la multinacional de la alimentación Unilever, Paul Polman, dijo que para entonces se necesitará producir un 70% más de alimentos. Ello implicará riesgos por el aumento de las emisiones de dióxido de carbono y del consumo de agua.
El director general del Fondo de la ONU para la Agricultura y la Alimentación (FAO), José Graziano da Silva, hizo hincapié en que «podemos alimentar a toda la población del planeta; el problema no es de abastecimiento, sino que la gente no tenga medios para conseguir comida».