EFE/NUEVA YORK
La Bolsa de Nueva York arrancó ayer con optimismo y nada impidió, ni siquiera la caída de la confianza de los consumidores, que el Dow Jones cerrara con un espectacular avance del 10'88% que permitió borrar los descensos de la última semana. Medida en puntos, esta fue la segunda mayor subida registrada por el principal indicador de Wall Street en su historia, por detrás de la lograda hace tan solo quince días.
La posibilidad de que el miércoles la Reserva Federal de Estados Unidos apruebe un nuevo recorte de tipos de interés alimentó ayer la esperanza de los inversores de que el mercado crediticio, aún lejos de descongelarse, esté empezando ya a ganar algo de temperatura.
Al otro lado del Atlántico también albergan esa esperanza, lo que ayudó a que algunas plazas cerraran en positivo (Londres 1'92%, París 1'55% y Fráncfort 11'28%), aunque Madrid cerró con un descenso del 1'3%. La Bolsa de Madrid encadena seis sesiones de caídas y ha perdido la cota de los 8.000 puntos lastrada por la caída de los grandes valores "en una sesión de alta volatilidad".