Ciudadanos de varios rincones del mundo consideran que la reelección del presidente de Estados Unidos, George W. Bush, ha hecho el mundo más peligroso, según un sondeo del servicio mundial de la BBC en 21 países publicado ayer. Sus resultados, divulgados la víspera de la segunda investidura del mandatario estadounidense, indican que sólo los encuestados en India, Polonia y Filipinas opinan que el mundo es ahora más seguro tras la reválida de Bush.
Un 47% de las cerca de 22.000 personas sondeadas creen que la influencia mundial de Estados Unidos es negativa. En Europa, esa cifra aumenta hasta el 58%, mientras que es en los países occidentales, así como en América Latina y los países árabes, donde Bush suscita las peores consideraciones.
«Bush despierta sentimientos negativos que se generalizan hacia los estadounidenses que lo reeligieron», declaró Steven Kull, director del Programa Internacional de Actitudes Políticas (PIPA), que ha llevado a cabo la encuesta junto a la firma GlobeScan.
Por otra parte, Irak en el frente exterior y las pensiones en el lado interno son los dos grandes retos del segundo mandato que inicia hoy el presidente Bush que medirá su legado por el éxito que logre en ambos asuntos. Tras jurar el cargo en la terraza del Capitolio, Bush expondrá sus prioridades en un discurso de 17 minutos, en el que tiene previsto apelar a la unidad nacional.
Bush, en una avalancha de entrevistas con la prensa y la televisión estadounidenses, ha señalado que espera comenzar rápido y «lograr hacer algunas cosas antes de que la gente empiece a desecharme». Con estas palabras, Bush tiene en cuenta que, tradicionalmente, los presidentes no suelen conseguir nada importante en el último año de su segundo mandato, lo que reduce sus posibilidades de lograr el preciado «legado histórico».