El primer ministro Ariel Sharón afirmó hoy, martes, en una reunión con embajadores israelíes, que Europa no podrá participar en el proceso de paz para Oriente Próximo debido a «sus posiciones no equilibradas respecto de Israel».
Así como Israel se niega al ingreso de fuerzas internacionales a la zona del conflicto con los palestinos (Cisjordania y Gaza) -indicó Sharón-, también se opone a una intervención directa de Europa en las negociaciones de paz.
Sharon situó el papel de Europa en intentar mejorar las condiciones de vida de los palestinos, presionarles para que pongan en práctica reformas en su aparato de Gobierno -la Autoridad Nacional Palestina (ANP)-, o para que adopten «leyes contra las organizaciones terroristas».
El jefe del Gobierno israelí dijo que existen actualmente intentos de negar la legitimidad del Estado judío creado en 1948, y dijo que no estaba satisfecho con los esfuerzos que están haciendo los representantes del Estado para contrarrestar esa tendencia.
«Existen reclamos contra el derecho de nuestro pueblo a un estado judío. Yo veo esto, que es también resultado del antisemitismo, y seguramente un efecto de la existencia de grandes colectividades árabes en Europa», afirmó Sharón, quien exhortó a los diplomáticos a insistir en estos puntos de vista antes sus interlocutores.
De otra parte, dos militantes del Movimiento de la Resistencia Islámica (Hamás) salieron ilesos ayer de un nuevo intento de asesinato por parte de Israel en la franja de Gaza.