El presidente de la Autoridad Nacional Palestina (ANP), Yaser Arafat, no padece leucemia, si bien los análisis han confirmado anomalías sanguíneas y digestivas, según el el primer parte médico del hospital militar de Percy, a las afueras de París, divulgado ayer.
El texto, leído por la delegada de Palestina en Francia, Leila Shahid, ante el hospital donde Arafat está ingresado desde el pasado viernes, indica que los primeros análisis han confirmado anomalías sanguíneas: «una tasa elevada de glóbulos blancos y una tasa baja de plaquetas», pero han permitido «eliminar la leucemia».
Agregó que los exámenes de control muestran «la persistencia de ciertas anomalías que conciernen en particular a las funciones digestivas». Shahid precisó que el estado general de Arafat, de 75 años, «ha mejorado» en las últimas 72 horas.
Añadió que el parte médico fue establecido por el centro hospitalario y difundido con el acuerdo del líder palestino, de sus familiares y del hospital.El objetivo de su divulgación es acabar con «todas las conjeturas» sobre el estado de salud del líder palestino.
El lunes, el principal asesor de Arafat, Nabil Abú Rudaina, había calificado de «bueno y estable» el estado del presidente palestino, que sigue «bajo tratamiento». Otras fuentes palestinas consideran que la hospitalización de Arafat podría prolongarse al menos tres semanas. No se sabe cuándo se conocerá el diagnóstico de los médicos.
Arafat fue trasladado desde Aman a Francia el pasado viernes en un avión hospital enviado por el Gobierno francés, después de que su estado se deteriorara bruscamente el pasado miércoles.
Desde su cama de hospital, Arafat ha estado en contacto telefónico con varios dirigentes, entre ellos el rey Abdalá de Jordania y el presidente egipcio, Hosni Mubarak, y con el primer ministro palestino, Ahmed Qurea.