La empresa kuwaití para la que trabajan los siete camioneros secuestrados hace dos semanas en Irak anunció ayer que acepta las condiciones de los secuestradores y suspenderá sus actividades en Irak para salvar la vida de sus empleados.
La empresa aceptó, asimismo, compensar a los habitantes de la ciudad iraquí de Faluya, asediada y atacada por las tropas estadounidenses, tal y como exigían los captores, informó el canal de televisión por satélite qatarí, Al-Yazira.
Los siete camioneros (tres indios, tres kenianos y un egipcio) habían sido capturados hace 10 días cuando su convoy viajaba de Kuwait a Bagdad.
El grupo de secuestradores, autodenominado «Los Portadores de las Bandas Negras», había amenazado con comenzar a asesinarlos ayer tarde si no se cumplían sus exigencias.
Desde que el pasado abril estallara la denominada «crisis de los secuestros», diferentes grupos radicales han secuestrado a cerca de 70 ciudadanos extranjeros de más de 20 nacionalidades, algunos de los cuales han sido puestos en libertad, otros siguen retenidos y varios han sido asesinados.
Precisamente, ayer un grupo armado islámico relacionado con el terrorista de origen jordano Abu Musab al-Zarqaui, presunto líder de Al Qaida en Irak, anunció el secuestro de dos camioneros turcos y amenazó con decapitarlos en 48 horas si la compañía para la que trabajan no abandona suelo iraquí.
El canal de televisión por satélite qatarí, Al-Yazira, mostró imágenes de un vídeo en el que aparecen los dos rehenes con sus pasaportes y detrás de ellos tres individuos vestidos de negro y armados.
La cadena señaló que un grupo denominado Al-Tawhid wal Jihad (Unificación y guerra santa) anunció el secuestro de dos conductores de una empresa turca porque suministra material y otras mercancías a las fuerzas militares norteamericanas en Irak desde territorio turco.