El asesinato del líder espiritual de Hamas, Ahmed Yasín, a manos del Ejército israelí en Gaza sigue provocando reacciones de condena, y a los gobiernos europeos y árabes se ha sumado el secretario general de la ONU, Kofi Annan, que lo calificó de «contrario al derecho internacional».
Estados Unidos se ha limitado hasta ahora a negar que hubiera sido advertido por anticipado por el Gobierno israelí sobre sus planes de eliminar al jeque. En cualquier caso expresó su preocupación al considerar que aumenta la tensión en la región.
Los gobiernos de la UE culparon a Israel de encender el conflicto palestino-israelí y violar la legalidad internacional con el asesinato del líder espiritual de Hamás, al tiempo que urgieron a las partes a la moderación.
El asesinato de Yasín es un «acto peligroso» que puede inflamar la región, subrayó ante la prensa el presidente de turno del Consejo de Ministros de la UE y titular de Exteriores irlandés, Brian Cowen.
La UE, señalaron los ministros, «reconoce el derecho de Israel a proteger a sus ciudadanos contra ataques terroristas».
«Israel no tiene derecho, sin embargo, a realizar asesinatos extrajudiciales», indicaron los titulares de Exteriores. Aseguraron que, «además, el asesinato que acaba de realizarse ha inflamado la situación».Los países de la Liga Àrabe coincidieron en calificar la ofensiva israelí como «terrorismo de Estado», tal y como indicó el secretario general de la Liga, Amr Mussa. Además, afirmó que esta operación mostraba las «intenciones agresivas de Israel» y acababa con «cualquier esperanza de crear las condiciones que permitan una solución política del conflicto».