EFE-RFA
El euro terminó ayer la jornada muy cerca de su nuevo récord
histórico, 1'2869 dólares, gracias a la decepción por los últimos
datos de empleo en EEUU. La divisa europea se cambiaba hacia las
17.15 horas GMT a 1'2853 dólares, frente a los 1'2736 dólares de
ayer por la mañana y los 1'2737 dólares en los que el Banco Central
Europeo fijó ayer su cambio oficial.
A primeras horas de la tarde, el euro alcanzó un nuevo máximo, los 1'2869 dólares, después de conocerse los últimos datos del mercado laboral estadounidense.
La tasa de desempleo en EEUU bajó dos décimas en diciembre y se situó en el 5'7 por ciento, pero la creación de puestos de trabajo fue mucho más baja de lo que esperaban los expertos con sólo 1.000 empleos, frente a los 43.000 de noviembre.
El dato fue suficiente para disparar de nuevo al euro, que ya se había revalorizado con fuerza el jueves tras la tranquilidad del BCE sobre la fortaleza de la moneda única. Los expertos creen que la divisa europea seguirá ganando terreno y no descartan que rebase en breve la barrera psicológica de los 1'30 dólares.
Por otra parte, los precios del petróleo se situaron ayer en niveles no vistos desde la guerra en Irak, arriba de los 31 dólares en Londres y superando la barrera simbólica de los 34 dólares en el mercado de futuros de Nueva York, a causa de la oleada de frío en Estados Unidos.
El barril de Brent del mar del Norte para entrega en febrero, referencia en el International Petroleum Exchange (IPE) de Londres, avanzó 52 centavos a 31.60 dólares por barril en Londres, niveles no vistos desde mediados de marzo. En Nueva York, el precio del crudo de referencia para entrega en febrero ganó 48 centavos a 34'46 dólares, su mayor nivel desde el 17 de marzo de 2003.
El precio del barril se disparó ante la inquietud de los inversores, que temen que las bajas temperaturas que prevalecen en EE UU socave los stocks de petróleo, gas natural y gasolina.