FRANCE PRESS-EFE
El periódico 'The New York Times' -que cita a funcionarios de alta
jerarquía, no identificados, en el gobierno del presidente George
W. Bush- agrega que Sadam Husein «actúa como catalizador o, aún,
caudillo, en la oposición armada». El domingo pasado, el
administrador civil de Irak, el estadounidense Paul Bremmer, afirmó
que, probablemente, Sadam Husein esté vivo y en el país.
El Times de Nueva York añade que «probablemente Sadam opera desde una base cerca de Tikrit, su ciudad natal y su reducto». El papel de Sadam Husein en la resistencia iraquí «quizá va mucho más lejos que lo que hasta ahora había reconocido el gobierno de Bush, que ha buscado pintar al ex gobernante iraquí como un prófugo irrelevante», según el diario.
Aunque las versiones sobre el papel en la resistencia del que fuera presidente de Irak no ha podido ser corroborado, el Times sostiene que tres funcionarios de alto rango «describieron como creíbles los informes de un papel más importante».
El presidente Bush, por otra parte, cuenta con el apoyo de la Cámara de Representantes a la contribución de 87.500 millones de dólares para el despliegue en Irak y Afganistán, que precisa ahora la aprobación del Senado. La Cámara de Representantes aprobó con 298 votos a favor frente a 121 el proyecto de ley que deberá ser refrendado por el Senado y del que 18.600 millones de dólares serán empleados para las tareas de reconstrucción.
El grueso de la financiación, unos 65.000 millones de dólares, permitirán sufragar los gastos de la ocupación militar de Irak y el despliegue militar norteamericano en Afganistán. Los demócratas que votaron en contra afirmaron que la falta de un adecuado plan para la posguerra en Irak no sólo ha causado la pérdida de vida de soldados, sino que supone un gasto para los contribuyentes estadounidenses por el escaso apoyo internacional al despliegue en Irak, y pese a la existencia en el país de importantes reservas de petróleo.