El anuncio se producirá después de una reunión tripartita entre representantes de Israel, EEUU y la ANP, y en la que participará el propio Sharon, según las fuentes. El ministro de Asuntos Exteriores israelí, Simon Peres, afirmó ayer que Israel decidió poner fin a las operaciones en los territorios palestinos para demostrar que «toma en serio» la misión del enviado especial estadounidense Anthony Zinni, añadiendo que realiza todos los esfuerzos para que tenga éxito, especialmente adoptando algunas medidas para demostrar su buena voluntad.
«Dijimos que no habrá más bombardeos, demolición de casas ni entrada en la zona A, bajo control total palestino», afirmó. Antes de reunirse con Sharon, Zinni se entrevistó ayer tarde con Arafat en la ciudad cisjordana de Ramala, por segunda vez desde que llegó a la zona el jueves. Sin embargo, la buena noticia no pudo evitar que una familia palestina falleciera ayer tras una explosión. La madre, de 42 años, y sus hijos, de entre 8 y 15, iban en un carromato tirado por una mula cuando estalló el artefacto y mató a los cinco, informaron fuentes médicas de la Autoridad Nacional Palestina (ANP).
La mujer, identificada como Zeina el Awawda, ingresó cadáver en el hospital Shifa de Gaza, al igual que sus cuatro hijos, que murieron a causa de la metralla. El suceso ocurrió en una carretera al este del campo de refugiados de Al Bureij, en el corazón de la banda autónoma, pero las fuentes no precisaron si se trataba de una mina o de una bomba.
Por otro lado, un palestino murió ayer en el distrito cisjordano de Hebrón en un enfrentamiento armado con soldados israelíes. El incidente se registró en las cercanías de un colegio en el centro de la ciudad y la víctima fue identificada como Mohamed Dawne, de 26 años, informaron fuentes palestinas. Asimismo, una palestina de 17 años fue detenida ayer en Netanya, cuando intentaba apoderarse del arma de un vigilante en un centro comercial para cometer un atentado.
El Consejo Europeo pide la libertad de Arafat y el
cumplimiento del derecho internacional
El Consejo
Europeo de Barcelona aprobó ayer una declaración en la que
considera que la paz en Oriente Medio debe basarse en la
convivencia de dos Estados en paz y pide a Israel la libertad de
movimientos del líder palestino, Yaser Arafat, y el cumplimiento
del derecho internacional. Esta declaración fue aprobada por los
líderes de los Quince en la cena que cerró la primera jornada de
trabajo de la Cumbre de Barcelona, según informó el presidente de
turno del Consejo de ministros de la UE, Josep Piqué.