El presidente ruso, Vladímir Putin, amenazó ayer con que Rusia dotará de cabezas múltiples a sus cohetes atómicos si Estados Unidos abandona el tratado ABM contra defensa antimisiles y pone en marcha su polémico proyecto de un «paraguas» nuclear. «Se trata de la respuesta más eficaz y más barata, a la que no se podrá hacer frente durante los próximos 50 ó 100 años», dijo Putin a la prensa tras celebrar negociaciones con el presidente austríaco, Thomas Klestil.
Putin, quien ya aceptó negociar con EE UU la revisión de algunas cláusulas del ABM sin alterar su «esencia», repitió así cara a su nación y en presencia de un líder europeo las ideas expuestas hace cuatro días a la prensa estadounidense y que un jefe militar ruso calificó de «instrumento de presión diplomática». Puntualizó que gracias al ABM «el mundo no ha llegado al borde de una catástrofe global, salvo durante la crisis del Caribe» de 1962, cuando la URSS y EE UU estuvieron a un paso de un choque nuclear tras el despliegue secreto de misiles soviéticos en Cuba.