La situación en Mitrovica, conflictiva ciudad del norte de Kosovo, es «muy seria» tras el incidente que se saldó ayer con varios heridos, entre ellos dos soldados franceses de la KFOR, declaró el teniente coronel Patriques Chalau, de esa fuerza multinacional de paz. El teniente coronel precisó que un soldado galo fue herido en el estómago por disparos de francotiradores, mientras que el otro sufrió lesiones en la mano, y que ambos han sido llevados al hospital del contingente francés de la KFOR en Mitrovica.
El oficial indicó que el toque de queda, impuesto hace más de una semana durante siete horas nocturnas en Mitrovica, ciudad dividida en la zona norteña, de mayoría serbia, y meridional, poblada por albaneses, ha sido prolongado. «La KFOR también ha advertido a través de las emisoras de radio locales que sus soldados dispararán contra cualquiera que tenga armas», declaró el teniente coronel Chalau, que aseguró que hay francotiradores en ambas partes de la ciudad.
Fuentes de la KFOR informaron también de que seis albaneses resultaron heridos, mientras que, de acuerdo con fuentes serbias, también dos serbios sufrieron lesiones en el tiroteo cruzado entre la fuerza multinacional y los albaneses en las proximidades del puente sobre el río Ibar, línea divisoria entre las zonas «serbia» y «albanesa» de Mitrovica. La ciudad, uno de los pocos enclaves donde se concentran serbios que permanecen en Kosovo, está dividida desde junio pasado tras la retirada de Kosovo de las fuerzas serbias.
Al parecer, el incidente se produjo ayer en Mitrovica cuando un grupo de albaneses intentaron pasar a la zona norteña de la ciudad, y los soldados galos dispararon al aire en señal de advertencia para impedir ese intento. Fuentes serbias aseguraron que los albaneses lograron irrumpir en tres edificios, hirieron a una persona y apalearon a otra más.