El Gobierno federal alemán reiteró ayer su exigencia de que se suprima el Fondo de Cohesión para España, Portugal e Irlanda porque ya han accedido al euro, pero fuentes oficiales precisaron que esta actitud no representa la postura de la Presidencia de la Unión Europea (UE).
El Ministro de Estado para Asuntos Europeos, Gunther Verheugen, en manifestaciones efectuadas ayer repitió una actitud que el canciller, Gerhard Schroeder, y sus ministros anunciaron a su llegada al poder sobre la incompatibilidad de las ayudas comunitarias.
Un portavoz de Verheugen matizó que sus declaraciones no deben interpretarse al pie de la letra como el enfoque con el que la Presidencia alemana aborda con los estados de la UE la compleja negociación de la Agenda 2000, punto principal de sus prioridades en la presidencia.
En la introducción a una conversación con el ministro francés de Asuntos Europeos, Pierre Moscovici, Verheugen afirmó: «Como los Fondos de Cohesión se establecieron para facilitar el acceso a la Unión Económica y Monetaria, se debería deducir correctamente que sólo puede estar a disposición de los estados que todavía no participan en el euro».
La conclusión señalaba que esto suponía que España, Portugal e Irlanda no tenían derecho a recibir las mencionadas ayudas y Grecia sería el único país favorecido.
Las mencionadas fuentes informativas alemanas señalaban que esta actitud correspondía a la Presidencia comunitaria que el gobierno alemán ejerce durante el presente semestre.