Al día siguiente de que se supiera que Mandelson recibió 373.000 libras (unos 80 millones de pesetas) del viceministro del Tesoro, Geoffrey Robinson, la renuncia supuso un intento claro del Gobierno por demostrar que no acepta casos de corrupción. A la dimisión de Mandelson se sumó pocas horas después la del propio Robinson, un íntimo amigo del primer ministro británico, Tony Blair, y quien ha responsabilizado de su decisión a una «sucia campaña política» contra él.
«Lamento la situación. Llegamos al poder prometiendo que mantendríamos el mejor nivel de comportamiento en la vida pública. Tenemos que demostrar que cumplimos», declaró Mandelson tras presentar su dimisión a Blair. También admitió que nunca debió solicitar el préstamo y que debió informar del mismo a su Ministerio.
Según reveló el diario «The Guardian», Mandelson ocultó durante más de dos años el préstamo de 373.000 libras que recibió de Robinson, cuyos negocios son investigados actualmente.
Mandelson le solicitó el préstamo para poder adquirir una vivienda en el barrio londinense de Notting Hill Gate, al tiempo que recibió una hipoteca de 150.000 libras de una institución bancaria británica.
Al parecer, el ex ministro mantuvo en secreto el dinero recibido de Robinson hasta el pasado jueves, cuando se lo comunicó a Blair, ya que el caso era investigado por el diario «The Guardian» y saldría publicado pronto. El director del periódico, Alan Rusbridger, dijo ayer que la «historia en el 'Guardian' fue publicada tras dos años de continuada investigación. La historia completa aún tiene que ser publicada, pero la renuncia de Mandelson parece que fue un resultado inevitable».