Cuando Ciudadanos era un partido exclusivamente catalán, cuando nadie o casi nadie conocía a Albert Rivera, este apareció desnudo en un cartel electoral con el que pretendía convencer al electorado para gobernar la Generalitat de Cataluña. Corría el año 2006 y su impacto en la política catalana y nacional en su conjunto fue inmediato. Hoy, casi dos décadas después de aquel hito político y a las puertas de su posible desaparición, CS y su candidata en Barcelona, Anna Grau, hacen un guiño al pasado y rememoran sus orígenes.
Así, la candidata de Ciutadans a la alcaldía de Barcelona en las elecciones municipales del próximo 28 de mayo, Anna Grau, ha presentado este miércoles su cartel electoral, donde muestra parte de su torso desnudo junto al eslogan «Libérate», una apuesta inspirada en la imagen rompedora con la que Rivera se presentó por primera vez a unos comicios.
En aquel momento, CS era una formación recién fundada, con un candidato joven y en ese momento desconocido. En buena medida gracias a la audacia y al riesgo implícito del cartel, en el que aparecía desnudo bajo el lema «Ha nacido tu partido», enseguida dio de qué hablar. El debut electoral de CS terminó con un resultado que al principio pocos auguraban: los de Rivera consiguieron sus primeros tres escaños en el Parlament e iniciaron un ciclo político al alza, hasta tocar techo en 2017, cuando se situaron como primera fuerza catalana con 36 escaños. De allí pasaron a un descenso sostenido de sus apoyos hasta el crítico momento actual.
La candidata Anna Grau ha estado acompañada por los primeros cinco integrantes de su lista en la sede del partido, donde ha defendido «volver al kilómetro cero» en referencia a la primera imagen electoral de los naranjas, para «renovar los votos» con Barcelona y Cataluña.
«Queremos liberarnos de toda esta vieja política, de todos los turistas políticos, de toda la gente que ha pensado que Barcelona era una plataforma política para su promoción personal», ha explicado Grau, que ha avanzado que su «núcleo duro de pelar» trabajará y «no mentirá». Aun así, ha advertido de que, «seguramente», CS tiene que «pedir perdón» a sus votantes «por los errores cometidos» en el pasado, sin dejar de poner en valor «los aciertos» y la tarea realizada por el partido.