Sumar Més. Es el nombre con el que la coalición de Yolanda Díaz se presenta a las próximas elecciones generales, pero es mucho más que eso porque es el nombre con el que Més busca romper la maldición de estos más de 40 años que ha dejado sin presencia en el Congreso a un diputado que no esté adscrito a un partido estatal. Més lo ha intentado con una alianza de partidos nacionalistas encabezada por Pere Sampol que fracasó. Lo intentó en las elecciones de abril de hace cuatro años bajo las siglas de Podemos y Antoni Verger se quedó sin escaño. Ahora es Vicenç Vidal quien aspira a romper la historia y conseguir que la formación entre en el Congreso.
Las encuestas que se han publicado hasta ahora les dan un diputado seguro, lo que supone un éxito si se mira de dónde vienen los partidos que forman la coalición: Podemos y Més, más la plataforma de Yolanda Díaz.Hace poco más de un mes, Podemos recibió un serio correctivo en las elecciones autonómicas y quedó al borde del extraparlamentarismo. Més mantuvo sus cuatro escaños, pero también perdió votos. La opción de que ambas opciones se presentaran en solitario a estas inesperadas elecciones era una garantía de fracaso absoluto, así que no les ha quedado más remedio que establecer una alianza de conveniencia que incomoda un poco a los puristas de ambas formaciones. No quedaba otra si querían salvar para la izquierda uno de los dos diputados de Podemos en las elecciones de noviembre de 2019.
El candidato
Vicenç Vidal, hasta ahora senador autonómico que ha cultivado estos cuatro años unas excelentes relaciones con Más País e Íñigo Errejón, se puso de inmediato al frente de las negociaciones para sacar adelante el proyecto. Los sectores más soberanistas de Més, a quienes pueden incomodar esta entrega a un partido estatal, le han aceptado con menos desagrado del esperado porque el candidato les merece respeto. Para tratar de conquistar ese espacio a la izquierda del PSIB en el que hasta ahora coincidían Més y Podemos, los dos partidos han hecho equilibrios en la lista. La encabeza Més y no aparece nadie de Podemos hasta el puesto número cuatro. En medio hay independientes y personas más cercanas a lo que en su día representó Izquierda Unida, es decir, Yolanda Díaz, y el colorido colofón lo pone un juez José Castro a quien en su día tentaron para que fuera el número uno de Podemos en Balears, pero que no acepto. Del juez Yllanes al juez Castro.
Las perspectivas
Las perspectivas de la coalición son buenas y malas a la vez. Son buenas porque hay opciones reales de que logren un diputado en el Congreso, pero son malas porque Podemos por sí sola logró dos diputados hace cuatro años que ahora se antojan una quimera. Los tres partidos que ahora van juntos, Podemos, Més y Más País, conquistaron más de 100.000 votos en 2019. Es previsible que ahora se queden en la mitad porque la izquierda a la izquierda del PSOE llega dividida, con gran enfrentamiento entre Yolanda Díaz y Ione Belarra, y Podemos aún no ha superado la depresión de las autonómicas. Esa otra maldición, más real que histórica, es a la que ahora se enfrenta Vicenç Vidal.