El candidato de Ciudadanos, Albert Rivera, ha admitido este miércoles que parece poco probable que el centro-derecha sume una mayoría parlamentaria suficiente para gobernar tras las elecciones generales del 10 de noviembre. Por ello, ha apostado por que el PP y Cs mantengan a Pedro Sánchez como presidente, pero «atándolo en corto».
«Ojalá la suma Ciudadanos-PP ahora mismo diera una mayoría», pero hay «muchas posibilidades» de «que no sumemos», ha dicho en una entrevista en esRadio. En ese caso, cree que el objetivo debe ser evitar que el PSOE pacte con Unidas Podemos y con partidos nacionalistas.
«Para que domine la economía Pablo Iglesias y que la política territorial la haga Quim Torra, prefiero a Cs y el PP atando en corto al Gobierno con un pacto de Estado. Creo que esa es la única solución viable», ha manifestado.
En este sentido, ha propuesto que esa colaboración entre los tres partidos vaya «más allá de la investidura» y dure toda la legislatura, porque «si no hay presupuestos, mayorías reforzadas y leyes orgánicas», en España no se podrá hablar de sanidad, educación, pensiones o natalidad.
Pero, además de impulsar juntos una serie de reformas, Rivera cree que la formación naranja y el PP deberían exigir al futuro Ejecutivo socialista que «rectifique» su posición respecto a Cataluña.
Tras insistir en que hay que aplicar el artículo 155 de la Carta Magna para destituir a Torra como presidente de la Generalitat, ha dicho que «gobierne quien gobierne», debe haber un pacto de Estado entre PSOE, PP y Cs «para blindar la unidad de España y la Constitución».
Considera que si en Catauña no se garantiza «la seguridad en las calles y la paz cívica e institucional» -que se respeten las resoluciones del Tribunal Constitucional- y si en el poder continúa «un señor que chantajea con la violencia para negociar la independencia», el país no podrá avanzar.
El líder de Cs ve fundamental «desmontar 40 años de hegemonía absoluta» del nacionalismo. A su juicio, no se trata de «un problema de una semana en la calle», por las protestas contra la sentencia del 'procés', sino que el nacionalismo se ha «infiltrado en las instituciones, la educación, los medios de comunicación, las subvenciones, las falsas embajadas y la Policía» autonómica.
Pero también ha culpado a los sucesivos gobiernos nacionales del PP y del PSOE, que han pactado con partidos nacionalistas y les han dado «una pátina de modernidad y de progresismo», haciéndole «cesiones permanentes».
Según Rivera, lo que hace falta ahora es que socialistas, populares y Ciudadanos se unan «transversalmente» para que «los nacionalistas no tengan la batuta» en España.
Y para que eso sea posible, ha animado a los electores «de centro y de centro-derecha» a ir a votar el 10-N, porque si Sánchez tiene la opción de sumar con la izquierda y los partidos nacionalistas, «la va a ejercer». Pero si no, «tendrá que entenderse con la oposición constitucionalista», ha añadido.
Por otro lado, el presidente del partido naranja ha vuelto a reclamar que el Ejecutivo central recupere las competencias en política penitenciaria que ahora gestiona la Generalitat de Cataluña, para que Torra no pueda «abrir la puerta de la cárcel antes de tiempo» a los líderes separatistas condenados por el Tribunal Supremo.
«No entiendo por qué los nacionalistas pueden siempre reivindicar competencias y el Estado nunca puede ejercerlas», ha declarado, abogando por quitarse los «complejos» y que el Gobierno de España asuma esas competencias en las «circunstancias excepcionales» actuales.