Pablo Iglesias, el candidato de Unidas Podemos en las elecciones generales del próximo 10 de noviembre, tiene la política en la sangre y la vive con pasión. Sus abuelos ya estaban vinculados al PSOE, partido al que él posteriormente ha criticado con dureza, especialmente a Felipe González y a Pedro Sánchez.
Con solo 14 años, Iglesias ingresó en la Unión de Juventudes Comunistas de España (UJCE) a la que perteneció hasta los veintiún años. En la universidad, primero se licenció en Derecho y, posteriormente, en Ciencias Políticas, su verdadera vocación. Iglesias fue muy activo en el movimiento antiglobalización. En 2008 logró el doctorado y desde ese año hasta 2014 fue profesor asociado de Ciencias Políticas en la Facultad de Ciencias Políticas y Sociología de la Universidad Complutense.
En 2010 se produjo un hito importante en su trayectoria, ya que se introdujo en el mundo de los medios de comunicación, tanto con programas propios como con colaboraciones. Esto le permitió darse a conocer y difundir su mensaje.
Lista de candidatos de Unidas Podemos al Congreso por Madrid
Iglesias recogió el descontento del movimiento 15M, al tiempo que se inspiró en el grito de 'Sí se puede' para el nombre, y en el año 2013 -cuentan que tras una reunión informal entre pizzas en el domicilio de Raúl Camargo- se concretó la idea de lanzar una candidatura para las elecciones al Parlamento Europeo de 2014. Un año después se presentó el nuevo partido político, que logró un resultado inesperado: irrumpió con cinco eurodiputados de 54 en el Europarlamento.
El líder de Podemos dejó la política europea para encabezar la lista a las elecciones generales de 2015: logró 44 escaños. Los tiempos marcados por la amistad fueron dando paso a los de desencuentros y rencillas. Poco a poco, fueron apareciendo fisuras en el partido fundado entre un grupo de amigos, hasta el punto que el único fundador que queda es el propio Iglesias.
El enfrentamiento más sonado de todos ha sido con Íñigo Errejón, la situación se venía tensando desde hace años, hasta que ha llegado a formar su propio partido, Más País, con el que se presenta a las elecciones.
Sin embargo, Iglesias no solo ha tenido crisis por las malas relaciones con sus antiguos compañeros. También ha demostrado tener muy poca sintonía con el PSOE y su secretario general, Pedro Sánchez, al que ha impedido en dos ocasiones llegar a la presidencia del Gobierno.
El objetivo de Iglesias era dar el 'sorpasso' al PSOE, pero no llegó a conseguirlo. En una asamblea de la formación morada llegó a decir «el cielo no se toma por consenso, se toma por asalto».
Para la historia queda también el día que le hizo el Gobierno a Pedro Sánchez y dio a conocer a la mitad de sus miembros en rueda de prensa, mientras el candidato socialista se reunía con el Rey Felipe VI en el marco de la ronda de consultas, tras las elecciones generales de 2015.
Más duro aún ha sido con antiguos dirigentes socialistas, como Felipe González, al que acusó de «tener el pasado manchado de cal viva», en relación a los Gal, durante el debate de la primera investidura fallida de Sánchez.
El líder de Podemos también ha recibido muchas críticas por comprarse un chalet en Galapagar. Muchos de los militantes y simpatizantes de Podemos no llegaron a entender que Iglesias pasase de estar en las plazas a vivir rodeado de lujo y seguridad. Para atajar esta crisis, decidieron Iglesias y su pareja, Irene Montero, decidieron someter a votación su continuidad al frente de la dirección del partido; el 68, 42 % de los que votaron respaldaron a la pareja.
En su día también se criticaron mucho sus relaciones con la Venezuela de Hugo Cháves y con el régimen iraní. Sin embargo, con el paso del tiempo ha logrado que estos temas dejen de estar tan presentes.
Los que conoce a Iglesias aseguran que es tan inteligente, rozando un punto de arrogancia, que le impide moverse con facilidad en la esfera política, donde se requiere más cintura. El resultado del próximo 10N determinará si Iglesias continúa en política o si vuelve a las clases y a las tertulias o programas de los medios de comunicación.