La encuesta de valoración de la temporada de la patronal de la pequeña y mediana empresa de Formentera (Pimef) pone de manifiesto que ha sido una temporada atípica e, incluso, ha ido peor de lo esperado. Esta encuesta se ha realizado a un total de 70 negocios, entre asociados y no asociados a la patronal y de los sectores del comercio, bares, restauración y ocio nocturno, alojamiento, construcción e industria, transporte y servicios náuticos. La encuesta se ha llevado a cabo durante el mes de octubre de forma telemática.
A la pregunta sobre cómo ha sido la temporada en su empresa, el 39,66% de los encuestados consideró que fue normal frente al 34,48% que la tildó de buena. En este punto es preciso destacar que el 20,69 afirmó que había sido mala o muy mala y únicamente el 5,17% la calificó como muy buena. En este sentido, el 54% de las empresas encuestadas afirmó que sus ventas en comparación con la temporada 2022 habían bajado, mientras que para un 29% han subido entre un 1% y un 25%. Así, el 39% de los encuestados contestaron que en la temporada 2023 el gasto por turista había bajado frente al 41% que afirmó que no había variado respecto a años anteriores.
Uno de los datos positivos es que ha mejorado la estancia media. En este sentido, la mitad de los empresarios de alojamiento contestó que la estancia media había sido de entre cuatro y seis noches. «Ha mejorado bastante», señaló Pep Mayans, presidente de la patronal Pimef. En cuanto a la ocupación, los datos reflejan que ha funcionado mejor la temporada media, es decir, mayo y octubre. Sin embargo, los meses centrales de temporada han bajado.
CALIDAD-PRECIO. La encuesta analiza también cuestiones importantes que debe tener en cuenta Formentera como destino turístico. En este punto es preciso reseñar que el 55,55% de los empresarios encuestados considera que no se ofrece una buena relación calidad-precio. Si bien el 55,55% se trata de un porcentaje elevado, el resultado fue aún mayor en las encuestas del año 2022, donde entre el 80% y el 90% de los empresarios contestaron que eran conscientes de que en la isla no se ofrecía una buena relación calidad-precio. En este punto es preciso reseñar que el 37% consideró que el abuso de precios dependía del establecimiento y el 7,41% afirmó que la relación calidad-precio sí que era acertada.
Por sectores, llama poderosamente la atención que la mayoría de los empresarios de Formentera del sector bares, restaurantes y ocio nocturno tiene claro que la isla necesita una mejor y más amplia oferta de diversión por las noches. Así, el 90,48% de los empresarios de bares, restaurantes y ocio nocturno considera que es necesario ampliar la oferta por las noches. El 76,19% de los encuestados afirmó, además, que durante esta temporada ha recibido quejas de sus clientes por la falta de oferta de ocio nocturno. Entre los lamentos más escuchados de los turistas destacan la falta de alternativas de ocio a partir de la medianoche, así como la transformación de Formentera «en una residencia» o «en un lugar soso».
Otro de los aspectos destacados es que sigue notándose el llamado ‘efecto fin de semana'. Es decir, una mayor afluencia de gente de jueves a domingo. De hecho, el 52,38% de los empresarios contestó que su empresa había tenido más ventas de jueves a domingo frente al 38,10% que afirmó que las ventas eran regulares los siete días de la semana y el 9,52% que afirmó que vendían más de lunes a jueves.
PROBLEMAS. La encuesta también pone de manifiesto que el principal problema al que siguen enfrentándose los empresarios de la pitiusa sur es la falta de personal ocasionada por la escasez de vivienda asequible y el alto nivel de vida. De esta manera, el 55% proporciona vivienda a sus trabajadores, la mitad de ellos en viviendas propias y la otra mitad las alquilan, y entre estos últimos el 69% paga entre 2.000 y 4.000 euros mensuales de alquiler. Y es que casi el 60% ha tenido problemas para encontrar el personal adecuado y necesario.