Alfonso Rojo Serrano (Cantabria, 1964) es desde 2015 el octavo presidente de la historia de la Petita i Mitjana Empresa d'Eivissa i Formentera (PIMEEF). El empresario del sector de la alimentación (‘Frutas La Palentina') denuncia el aumento de la economía sumergida y admite que algún sector está notando un leve descenso de la actividad.
¿Cómo está yendo la temporada para la oferta complementaria?
PIMEEF es una federación muy amplia y variopinta, pero en el sector de comercio y restauración, que es el principal en temporada, está yendo relativamente bien en relación a lo que se preveía. Es una temporada que empezó muy bien con mayo y junio. En julio nos hemos movido en los números que esperábamos. Algún sector ha notado algo menos de actividad, pero es que el año pasado fue de récord. Había gente que confiaba en que la tónica iba a ser ascendente, pero en julio no se puede aumentar dos dígitos.
Existe una sensación generalizada de que está bajando el gasto turístico. ¿Lo están notando las pymes?
El gasto turístico es cierto que no es acorde al número de visitantes que recibimos. Los números del aeropuerto están desbordados, pero es porque la gente se mueve más pero las pernoctaciones bajan. Se quedan menos tiempo. El aumento exponencial de turistas no es igual en términos de beneficio.
¿El turista debe hacer un gran desembolso para venir y pernoctar en Eivissa y una vez aquí deja de gastar?
Hay una realidad y lo dijeron los hoteleros: que estábamos en una cresta de la ola donde pedíamos subir precios a todo gas y al final quizás hay que replanteárselo. Si alojarse una noche de hotel va a ser 30% más caro que en otro destino, la gente se lo pensará. Cada año vienen con un presupuesto y lo que gasten de más en alojamiento queda de menos en consumo, y sí que ha levantado la alerta.
¿Quién se está beneficiando entonces de las buenas cifras de visitantes?
Nos estamos beneficiando todos, son visitantes que consumen, que están aquí. No hay unos más y otros menos; del que no nos beneficiamos es del que no viene. Que algunos proporcionalmente se benefician más, pues es normal. El que va a un hotel sabe que se lo va a gastar y lo ha escogido él, por lo tanto no se lleva una sorpresa. Eso puede pasar en la oferta ilegal, que reservas a través de un intermediario, luego llegas y no hay casa. Nadie se beneficia más que otros, el que ofrece su producto y la gente lo escoge no se lleva sorpresas.
¿Hay que repensar el modelo turístico de extremos que tiene actualmente la isla? ¿Por un lado turismo de borrachera y por otro, de lujo?
No se puede decir que no a ningún turista. Seguro que no queremos ningún modelo que cope más de la mitad en todo, ni que sea de fiesta ni de lujo. No hay para llenar toda la oferta de Eivissa con el lujo, y si algo tienen las Pitiüses es que es un marco que lo reúne todo, y el que viene buscando lujo lo encuentra con nuestras calas y montes, y eso es un trabajo de todos.
¿Tienen que hacer autocrítica los hoteleros y restauradores en cuanto a los precios?
Los precios y el mercado son libres, pero si te subes a la parra y cobras mucho por un servicio que no es acorde, la gente no es tonta. No conozco a ningún hotelero o empresario que no piense en la temporada que viene, que quiera hacer ‘pan para hoy y hambre para mañana'. Si ha habido una política equivocada, sabrán verlo para hacer los ajustes oportunos.
¿El brexit está teniendo más repercusión de la que se esperaba este año?
Estuve en las primeras reuniones con el Govern en la mesa de diálogo social y ya quedó claro que el año pasado no se iba a notar y este año tampoco en exceso porque casi todo estaba contratado y cogidos los cupos. Ese runrún y ese posible miedo todavía no se ha notado, quizás un pelín y algunos sean reticentes en el gasto, pero el tema estará en la temporada que viene.
¿De qué manera afectan al poder financiero pitiuso el intrusismo y la economía sumergida?
Lo hemos denunciado siempre y hemos puesto nuestro saber y hacer y nuestra información en manos de la Administración. El intrusismo no solo afecta al negocio, sino que hablamos de economía sumergida, de un IVA y de unos impuestos que no se generan y que nos afectan a todos. El sueldo de nuestros médicos y maestros sale de los impuestos que se recauden y si hay sectores en que un 20 o 30% se está haciendo en B es una sangría para la isla.
¿Agosto será el salvavidas de una temporada atípica?
La previsión de agosto va a ser casi de récords. Siempre hemos dicho que lo que salva la temporada es el inicio y el final. En agosto, a no ser que suceda una hecatombe, la actividad y ocupación se mueve entre el 80 y el 90% y lo damos por fijo. Este año tuvimos un inicio alegre y eso ya lo tenemos como colchón. Hablaremos de una buena temporada. Firmaríamos alargar a la segunda quincena de octubre, pero ya dependemos de la meteorología, aunque sabemos que para el campo y para nuestros pageses es también importante el agua. Nunca llueve al gusto de todos.
¿Qué opina del acuerdo alcanzado para que Eivissa esté libre de pisos turísticos?
En las Pitiüses tenemos un problema: los empresarios no podemos contratar gente por el problema de la vivienda al no encontrar precios asequibles. Tampoco vienen maestros, ni médicos ni policías, entonces entendemos que es una situación especial y como tal se tiene que tratar. Estamos en contra de todo tipo de oferta ilegal y alquilar a turistas en residencial no se debe permitir.