Igual que la Semana Santa en Palma sería impensable sin sus oficios y procesiones por las calles de Ciutat, las palmas en los balcones o incluso las monas de chocolate, también lo sería sin la visita de doña Sofía al concierto a beneficio de Projecte Home en la Seu el lunes siguiente al Domingo de Ramos.
Este año no fue una excepción y la reina emérita, madre del rey Felipe VI, no quiso faltar a su cita con la música y la solidaridad, acompañada de nuevo por su inseparable hermana, Irene de Grecia. Aunque llegaron más tarde de lo previsto, ambas fueron recibidas con cariño por numerosas autoridades nacionales y de las Islas, lideradas por la presidenta del Govern, Marga Prohens; la presidenta del Congreso, Francina Armengol; el delegado del Gobierno en Balears, Alfonso Rodríguez; Rosana Morillo, secretaria de Estado de Turismo, y el presidente del Consell, Llorenç Galmés, entre muchos otros.
Asimismo, también estuvieron presentes Jesús Mullor y Tomeu Català (Projecte Home), y Bernardo Feliu, nuevo presidente del Rotary Club de Mallorca. Cabe recordar que estas dos entidades son las impulsoras y organizadoras de este evento. Además, la mayoría del público –alrededor de 1.800 personas– esperaron a la reina emérita de pie y la acompañaron hasta primera fila con sus calurosos aplausos.
En esta decimoquinta edición la obra escogida fue el Réquiem de Mozart, que interpretaron tres formaciones clave en el panorama musical mallorquín: la Orquestra Simfònica de les Illes Balears, bajo la batuta de Pablo Mielgo; la Coral Universitat, dirigida por Núria Cunillera Salas, y la Capella de la Seu, a cargo de Joan Company. Cabe recordar que este último dejó su cargo al frente de la Coral Universitat por jubilación, después de 47 años al frente. Asimismo, en esta ocasión formaron parte del elenco las voces solistas que acompañaron a esta tríada fueron la soprano Irene Mas, la mezzosoprano Begoña Gómez, el tenor Joan Lainez y el barítono David Menéndez.
Tradición
Antes de empezar propiamente el recital, Bernardo Feliu dedicó unas palabras de agradecimiento a los organizadores, voluntarios y asistentes a esta «tradición». «Es gratificante oír que la gente sigue diciendo si el concierto continúa siendo el lunes de Semana Santa, o que ‘el año pasado no pude ir, pero este no me lo pierdo'. Se ha convertido en un elemento cohesionador de la sociedad por su trabajo bien hecho y la bondad de su objetivo, que es no olvidar, no solo a los usuarios de Projecte Home, sino a las personas que necesitan ayuda».
Finalmente, Jesús Mullor destacó «el ambiente y el escenario inmejorable que es la Seu, que nos acoge con todo el cariño y generosidad». A su vez, recordó que más de 1.000 personas pasan cada día por Projecte Home, «casi la mitad de los que estamos aquí».