El dramaturgo Pau Coya está viviendo un momento «dulce». El 7 de diciembre aterriza en el Teatre de Manacor su Cavallet de mar (o el peix invisible), que obtuvo doblete de premios, consiguiendo el Rei en Jaume de Calvià y el de teatro Jaume Roca de Andratx. Fue publicada a la vez por Documenta Balear y la Sala Flyhard de Barcelona, donde realizó la temporada, y que además se encarga de la producción de la obra.
La pieza aborda un tema poco tratado: el de las paternidades trans narradas a partir de la historia de Marc, un chico que se queda embarazado accidentalmente. A partir de ese momento debe cuestionarse diversas cosas. «Cavallet está funcionando bien, estoy contento con las críticas. De alguna manera está cercana a la temática de Pols de diamant, pese a que la primera obra habla de identidades y la segunda de lo LGTBI+», compara Coya.
El autor se interesó por los grupos de padres gestantes y por las vidas de hombres trans que decidieron quedarse embarazados como Pol Galofre o Rubén Castro. «Mi interés era la gestación masculina, pero no como planificación familiar. Quería escribir una obra sobre el contexto en el que un hombre trans decide gestar y los procesos que se producen», puntualiza el autor, a la vez que admite que pensó desde el primer momento en actores trans como Marc Torres, que es el protagonista de Cavallet y que le ayudó a «posicionarse en la historia» a través de la generosidad del intérprete. Para redondear la obra y buscar referentes, Coya partió de éxitos comerciales como Juno y otras películas del mainstream junto a capítulos históricos o mitológicos.
LGTBI+
Pols de diamant es la segunda obra que el dramaturgo tiene actualmente en escena. Con esta pieza ganó el Torneig de Dramatúrgia el pasado mes de enero, que organiza Produccions de Ferro y que tiene lugar anualmente en el Teatre Mar i Terra. Se trata de una pieza de temática LGTBI+ inspirada en un caso real que generó cierta repercusión en la opinión pública: un joven gay afirmó haber sido agredido cuando no era verdad y mintió por miedo a que su pareja se enterase de una infidelidad.
El autor remarca que el desarrollo de la pieza es universal, ya que entremezcla cuestiones como el miedo, las inseguridades del propio colectivo y la mentira. La pieza se interna en el universo de la prostitución masculina, algo que al dramaturgo le generaba miedo por las posiciones abolicionistas. «Al final esa preocupación quedó en nada, ya que la obra presenta el caso sin enjuiciar».
Coya también pone en valor el formato de la propuesta de Toni Gomila. Considera que «si no me hubieran invitado al Torneig de Dramatúrgia, no me habría colocado entre las cuerdas con ese formato ni con las limitaciones que impone [dos intérpretes, sin usar elementos de luz ni sonido]. Te fuerza a que todo el peso caiga sobre el texto. Eso te lleva a no depender de otras cosas. Debes hacer un esfuerzo para dotar de ritmo el relato. Creo que no hubiese escrito Pols de diamants si no me hubieran invitado», admite.
En cuanto a la residencia de creación del Centro Dramático Nacional (CDN), Coya explica que era la primera vez que se presentaba y lo hizo a través de las dos obras mencionadas: Cavallet y Pols. «Se presentaron 220 personas. Me llamaron para decirme que estaba entre los 12 seleccionados. Me hicieron una entrevista donde valoraron bien los dos proyectos, pero al final no me la concedieron. Estoy realmente contento, ya que quedar finalista entre tanta gente que se presentó constituye un reconocimiento», comenta, a la vez que adelanta que Pols llegará en marzo «probablemente» a la Isla.
Cuatro manos
Los nuevos proyectos del autor pasan por una obra a cuatro manos junto a Marta Aran para la Sala Flyhard. La obra se titula Fake it (aparenta fins que et surti) y trata del mundo del aparentar lo que uno no es a través de la figura de una bailarina de danza urbana que tiene muchos seguidores en redes y es contratada por una marca de ropa. «Creo que el tema es la sobreexposición de los jóvenes talentos a internet. Una historia de niños prodigio en pleno 2023, en palabras del autor, que también avanza que el texto que presentó al Torneig de Dramatúrgia Catalana, Nom volgut, estará presente en el Festival de la Paraula el 14 de diciembre, y donde vuelve a abordar el tema de lo trans a través de Lua, «una adolescente transexual con trastorno del espectro autista que es Helio». Una nueva pieza en la que el autor hace gala de nuevo de su compromiso y su saber hacer sobre las tablas.