Mitte, el centro histórico de Berlín y de la antigua parte comunista, cerca de Alexanderplatz, la Puerta de Brandeburgo y ejemplo propagandístico del bloque soviético, fue este sábado el epicentro de la cultura mallorquina. Arte, música, performance, gastronomía, teatro y danza con sello isleño se fundieron en el evento Live For The Arts, que organizan el Festival Literatura Expandida a Magaluf (FLEM) e Innside by Meliá y que lleva un tast de nuestra cultura a diferentes ciudades: en esta ocasión a Berlín tras paradas en Nueva York, Leipzig y Liverpool. El escenario fue el espectacular hall y zona de restauración y ocio del hotel Innside by Meliá Berlin Mitte, que recibió a varios centenares de personas.
Caminar por Berlín es pasear por un museo al aire libre. La creatividad bulle, por algo es la capital europea de la cultura urbana, cuna del street art, el arte del tattoo y, por supuesto, de las raves. Esa esencia se palpó en el Live For The Arts en el Innside by Meliá Berlin Mitte, una jornada conducida por el periodista Patrick Schirmer Sastre y que arrancó con un workshop de licor de herbes a cargo de Pep Mulet y Carlota Sobrino, del histórico colmado palmesano La Pajarita, abierto desde 1872. Casualmente, Berlín tiene arraigada también una gran tradición con las hierbas, un ejemplo es el célebre Jägermeister. Los asistentes no dudaron en probar varios de estos licores con el aroma de anís y hierbas como atmósfera.
Literatura
Y de la gastronomía a la literatura de la mano de la escritora Elisa Levi, cuya obra ha sido traducida al alemán, y la germana Katharina Mevissen. Una mesa redonda, titulada Entwined Voices (Voces Entrelazadas) y moderada por el editor catalán Oriol Viader, donde dialogaron sobre el oficio del escritor y cómo se iniciaron en el difícil mundo literario. En definitiva, «solo se necesita un móvil y una habitación donde escribir», bromeó Levi, a lo que Mevissen añadió entre risas: «Y dinero». Después, el arte callejero y la danza tomaron la meeting room del Innside by Meliá Berlin Mitte con una performance con el artista Diego Ingold y la bailarina Úrsula Urgelés, quienes trasladaron su trabajo a un espacio tan poco convencional para las artes plásticas y escénicas como es un hotel. Otra acción, en este caso artística, fue la que llevaron a cabo la artista y gestora cultural Marina Planas y el DJ Marlon Rudolph, alemán residente en Mallorca. Ella se sirvió de fotografías del Arxiu Planas sobre el boom turístico en Mallorca y objetos como la figurita de un camello o una Barbie, y él puso la ambientación musical.
Por supuesto, en un evento en Berlín no podía faltar una cata de cervezas, servida por Sebastià Barceló de Adalt Brew & BRLO, y el picoteo lo puso también La Pajarita, de nuevo con una cuidada selección de delicias de la cultura gastronómica mallorquina como cocarrois, magranes de berenjena, tablas de quesos, frit de verduras o gató d'ametlla.
Mientras tanto, a lo largo de la jornada, la artista visual Tonina Matamalas trazó una crónica ilustrada y otra artista, Anne Wenkel, realizó retratos en directo, un souvenir diferente que llevarse a casa que causó sensación. También la cultura del tattoo estuvo presente con Nil Marquès y Christian Eichenauers. Ambos hablaron de su labor y experiencia trasladando el tatuaje de la piel al lienzo y así lo mostraron con una exposición bajo el título From The Skin To The Gallery.
Ya en el tramo final, la música puso la guinda al Live For The Arts, con conciertos de Aina Zanoguera y Le Parody, un fin de fiesta perfecto.