Un fantasma recorre el mundo, el fantasma del K-Pop. Y lo hace a un ritmo irrefrenable. La fiebre por este fenómeno, que va mucho más allá de la música, ha generado un interés que ha trascendido, y mucho, las fronteras de su país de origen y ha llegado hasta las ciudades americanas y europeas. Incluso los que no han oído hablar de ello sí han escuchado las canciones de bandas como BTS o Blackpink, dos de sus baluartes principales. Y ahora, por primera vez, hay un libro que recoge los orígenes, los secretos y el funcionamiento interno de esta industria. Su autora es Eva Martínez y en K-Pop Rookie. Breve historia del K-Pop para novatos (Dolmen) desentraña todos estos elementos y más.
Martínez, que ayer mismo presentó el libro en Casa del Libro, no es ninguna recién llegada al mundo de la K. «Me crié en la generación que veía animes y series japonesas y me obsesioné con todo el mundo nipón, pero cuando preparaba mi segundo viaje a Japón tomé contacto con la versión coreana de la serie Hana Yori Dango, titulada Boys over flowers, y ahí descubrí todo el mundo de los k-dramas, la k-food, el k-beauty y, claro, el K-Pop».
‘Ola coreana'
Se dejó arrastrar, dicho de otra manera, por el hallyu wave, es decir, la ‘ola coreana' que ha inundado el planeta y todo el conocimiento que fue atesorando decidió «plasmarlo en un libro» porque, además, «no hay ninguno en España que hable de esto», asegura. Y K-Pop Rookie es el resultado, pero no es ninguna simple recopilación de sus gustos personales, sino una auténtica enciclopedia de casi 300 páginas sobre casi todo lo que tiene que ver con la cultura popular coreana, desde los orígenes que marcan el nacimiento de la industria del entretenimiento hasta los entresijos de la misma pasando por las diferentes generaciones y los referentes principales de cada una hasta llegar, cómo no, a BTS, la boy band que ha revolucionado la industria musical mundial con hits como Dynamite y que han arrasado en los recientes MTV European Music Awards.
De hecho, Martínez tiene una anécdota personal que ejemplifica el gran fenómeno que el grupo coreano supone y que se extiende al resto del pop coreano: «Fui a verlos al Stade de France, 85.000 personas, y creo que nunca me ha impactado algo tanto como entonces. Tuvieron que ampliar fechas y aun así se quedó gente sin entrada». No obstante, Martínez avisa de que el K-Pop va «mucho más allá de grupos como BTS o Blackpink» y anima a descubrirlo en su libro, que va dirigido «para todos aquellos que quieran conocer más de este mundo o que ya les interese». Además, para hacerlo todo mucho más ágil, la edición va acompañada de un código QR en todos y cada uno de los grupos, cantantes o artículos referenciados, para que «no tengan que ir buscándolo en Google» y, además, permite ver «que no es solo música, sino imagen, colores, el canon de belleza, etcétera».