Después de que Bernardo López publicara en redes sociales un vídeo pidiendo ayuda para evitar el cierre de Metrópolis, librería que regenta junto a su mujer Maria Rosa Ferriol, la pareja ha recibido numerosas muestras de cariño y apoyo. Tanto es así que López avanzó ayer a Ultima Hora que «estamos buscando otras opciones para no tener que bajar la barrera» y la primera alternativa, anunció, es buscar otro local. Desde hace dos años, Metrópolis está ubicada en la calle Reina Maria Cristina número 14 de Palma y antes, durante cuatro años, estuvo en la plaza Cardenal Reig.
«Estamos intentado encontrar un local para trasladarnos. Cuando tuvimos que cerrar por culpa de la pandemia y mi mujer se quedó embarazada, los caseros no se apiadaron de nosotros. No nos han perdonado nada y no ha habido ningún tipo de comprensión por su parte», lamentó López.
«Teniendo en cuenta este trato, la situación complicada que estamos viviendo y todo el apoyo que hemos recibido, hemos pensado que cambiar de lugar podría ser una buena idea», justificó. Además, explicó, «nos gustaría que el nuevo local sea más grande, para poder celebrar algunas actividades y dinamizar el panorama y que no solamente sea una tienda para venir a comprar e irse, y que, además, sea más céntrico».
«Incluso sería interesante mudarnos a alguna zona de librerías, por ejemplo Blanquerna, cerca de Rata Corner, o en los Geranios. Más que nada para hacer barrio con otras librerías y retroalimentarnos», apuntó. «De hecho, un señor vio el artículo publicado en este periódico y llamó a la tienda para ofrecernos un local que tenía vacío, pero estaba tan saturado en esos momentos que ni le pedí el nombre ni el número», contó ilusionado.
Así las cosas, López advirtió que «de momento, Metrópolis no cierra, pero la situación es muy delicada e insostenible y tenemos que encontrar un local ya, pues no podemos continuar así». «No puedo dar nombres, pero en los próximos días una persona relacionada con el mundo de la cultura anunciará una campaña para ayudarnos, a nivel nacional e incluso internacional. No le conocemos de nada y no es de aquí y cuando nos contactó, mi mujer y yo nos pusimos a llorar de la emoción», reconoció.
Asimismo, Bernardo destacó el apoyo que han recibido por parte del Gremi de Llibreters y del Clúster de Còmic, así como de «muchas librerías de toda España, que están diciendo a sus clientes que nos compren a nosotros, desde tiendas de Jaén, Madrid, Barcelona o Murcia». «Ahora nos toca luchar un poco más», concluye López, desbordado pero emocionado.