El Dia de les Illes Balears bajó el telón este domingo por todo lo alto con Carmen, que abrió la Temporada de Ópera de un Teatre Principal a rebosar con casi todas sus localidades ocupadas por un público que disfrutó las voces de la mezzosoprano Annalisa Stroppa y el tenor Andeka Gorrotxategi en esta adaptación de la obra de Bizet llevada a cabo por Calixto Bieito. Estrenada en 1998, esta producción no ha parado de dar la vuelta al mundo desde entonces y volverá a ser representarla los días 4, 6 y 8 de marzo.
Carmen es un clásico intemporal que relata las ansias de libertad de una mujer y la incapacidad de aceptar esa libertad por un hombre que termina asesinándola. Un tema, como se puede apreciar, de rabiosa actualidad, y que vio en el teatro su forma de denuncia más artística y al mismo tiempo más sonora a través de las imponentes voces de un repertorio liderado por la mezzosoprano italiana Annalisa Stroppa en el papel de la indomable Carmen.
A ella se unió Andeka Gorrotxategi en el papel de Don José y Germán Olvera como el torero Escamillo, que se codearon con un repertorio con un toque muy local en el que destacaron las sopranos Marga Cloquell y Marta Bauzà, o los barítonos Pablo López y Tomeu Bibiloni. Todos juntos llevaron a cabo un estreno de alto nivel para la nueva temporada de ópera, que ya cuenta su trigésimo cuarta edición.
Los espectadores, entre los cuales se encontraban personalidades como la presidenta del Consell, Catalina Cladera, o la vicepresidenta del Govern, Bel Busquets, pudieron apreciar el trabajado vestuario ideado por la premiada figurinista Mercè Paloma quien, junto a una escenografía muy moderna con coches sobre un escenario que rememora la Ceuta de los 70 imprime peligrosidad a la historia de la gitana y, en este caso, el legionario. Una obra que, como explicó la producción, «es intemporal». Como lo es la sentencia final con la que Carmen se despidió del escenario: «nací libre y libre moriré»